Rodar una película basada en un libro del maestro del terror, Stephen King, es bastante complicado. Si encima hablamos de It (Eso), la dificultad alcanza ya un grado sumamente elevado. ¿Por qué? Bueno, podemos referirnos a la extensión, a la gran cantidad de personajes, a los efectos que describe con todo detalle... Pero todo se resume en que es muy difícil hacer un buen filme del mejor libro de esta gran mente, tan atacada como defendida.
La película comienza muy bien, y mantiene un ritmo entretenido hasta la mitad del metraje aproximadamente. Es entonces cuando se desinfla y nos insta a darle al botón de las dos flechitas para que acabe cuanto antes. Una pena. Manteniéndose al principio fiel al libro consigue enganchar. En cuanto se distancia aburre sobremanera (algo comprensible, la verdad, dado que si la hubieran hecho completamente fiel sería extremadamente larga, pero no deja de decepcionar por ello), y el final es como de cachondeo. Esa es la mayor puñalada que se le ha dado al libro, el final. Si alguien lo ha leído comprenderé que se eche a llorar desconsolado cuando vea la caricatura en la que se convierte el Rito de Chüd.
En el apartado técnico, la película aprueba; sin llegar a tener unos efectos especiales alucinantes, son más que correctos, en especial las escenas en las que interviene Pennywise, el payaso.
Y es aquí donde está el mejor detalle con mucha diferencia del filme. Tim Curry borda (y subrayaría esta palabra si supiera cómo) su papel, hasta el punto de que se dice que cuando los demás actores se cruzaban con él bajaban la mirada. Es increíble todo en él, desde la caracterización hasta la propia interpretación de un personaje complicadísimo. El resto de actores cumplen con su papel, en especial Richard Thomas (Bill) y Anette O'Toole (Bev), pero ninguno de ellos le llega a la suela de los zapatos a Curry.
En resumen, una película para ver y disfrutar a ratos. Aunque pierde bastantes enteros pasado el ecuador del metraje, la primera mitad y, sobre todo, las escenas de Pennywise la compensan con creces.