Una extraña película, que aunque sean con muñequitos al más estilo Pingu, no es para nada infantil, todo lo contrario, es de lo más maduro y cruel para el mundo adulto.

La fotografía es espectacular y está fantásticamente rodada. Encima hay una canción que me encanta!!!

La historia (según dice, está basada en hechos reales) es muy triste y cruel, aunque con toques de humor y risas, se te hace más llevadero, si no, sería difícilmente digerible.