Vamos a ver: esta peli parte de una premisa firme, la de ganar pasta a mansalva apostando sobre seguro. No hace falta que Doug Liman ponga nada de talento para dirigir esta cosa, a pesar de que en los inicios de su carrera se podría augurar algo más (Swingers, Go, la excelente acción de El Caso Bourne); sin embargo, se ve que el hombre se acerca a los abismos, asomándose peligrosamente con ésta y sobre todo con su última peli, ese horror titulado Jumper.
Aquí nos hallamos ante una comedia romántica de acción, con dos superestrellas, los "Brangelina", cuya química es innegable; luego va todo rodado: no nos importa que el guión se pueda resumir en un par de líneas, aunque se extiendan a dos horas en la pantalla, lo que mola es que John y Jane se intenten matar unas veces y besuquear otras. Todo lo demás es supérfluo, ya que está recubierto de una inmensa cantidad de gadgets y parafernalia producto de un carísimo presupuesto, para intentar evitar que pensemos que lo que estamos viendo no es más que una de esas Escenas de Matrimonio, eso sí, "glamoureadas" por la simple aparición de sus actores protagonistas, que tampoco tienen que esmerarse en exceso para interpretar unos papeles extraplanos.
En fin, producto de una simpleza absoluta, paradigmático del cine que tiene éxito en nuestros días, qué le vamos a hacer...