Jeff Davis conocido por crear la serie original de la saga Mentes criminales o escribir el episodio piloto de «Let the right one in» (2017) crea «Teen wolf», una serie de televisión ambientada en el pueblo ficticio de Beacon Hills, California en la que un chico llamado Scott es mordido por un hombre lobo. A partir de ese momento él y sus amigos serán atraídos a un mundo sobrenatural desconocido hasta la fecha. Entre los actores tenemos a Taylor Posey —«Sucedió en Manhattan», «Daño colateral»— como Scott McCall, nuestro protagonista, Dylan O'Brien —«El corredor del laberinto», «American assassin»— como Stiles Stilinski, el mejor amigo de Scott o Holland Roden —«Bring it on: fight to the finish», «Consideration»— como Lydia Martin, interés romántico de este último y amiga de los anteriores.

Se trata de un drama adolescente de género sobrenatural con elementos de romance, comedia, acción, suspense, misterio y terror en el que unos amigos de institutos tratarán de superar los diferentes años de estudio a la vez que se verán atacados por diferentes seres sobrenaturales como otros hombres lobo, kánimas o doctores del terror. Los dos episodios de la primera temporada son muy aburridos pero si sigues viendo a partir del tercero el nivel sube bastante. La segunda temporada continúa con el nivel con episodios de mucho suspense y con mucho «cliff hanger». La tercera y la cuarta igual. La quinta iba a ser mi favorita pero incurren en un error típico de estas producciones, temporadas de veinte episodios que alargan demasiado la trama y aunque la primera parte está genial con los doctores del terror en medio cuando llevan quince episodios te da la sensación de que solo quieres que termine así que aquí se empieza a notar el agotamiento de la serie, sobre todo en la segunda parte. La sexta sigue el mismo esquema con una temporada dividida en dos partes y aunque tampoco es mi favorita que digamos reconozco que los últimos cinco episodios tienen el nivel de los primeros que me engancharon.

La música es la típica de adolescente yo escuché mucho electropop y synthpop géneros que se llevan mucho ahora y en menor medida otras músicas con más o menos elementos de rock. Hay una lista en Spotify con todas las canciones en orden desde la temporada uno por si le interesa a alguien. Algo que también me gustaría comentar no de la serie en sí misma son los efectos especiales, si bien el maquillaje y los ojos son de lo mejor la verdad es que los croma y los decorados por ordenador se notan muchísimo, era como muy de los noventa a veces.

Los actores están bien y eso que son todos muy jóvenes, eso sí, la cantidad de cuerpazos masculinos es de escándalo y de todas las edades porque también hay algunos adultos que son para darle de comer aparte como el personaje de Derek o Peter. El protagonista no es que sea extremadamente guapo la verdad y mi personaje favorito y creo que el de todos es el de Stiles que es el contrapunto gracioso en la serie. Los demás como ya digo bien y salen algunos conocidos como John Posey —padre del hijo de...— los gemelos que trabajaron en «Mujeres desesperadas» y alguno más que ahora mismo no recuerdo. Por cierto que Lydia es clavada a Lana del Rey y yo creo que lo hicieron a posta. Algunos directores conocidos son Jennifer Lynch —hija de...— o el mismo Tyler Posey que también produjo las últimas temporadas.

No tiene metascore pero sí una tomatá de setenta y nueve con las diferentes temporadas clasificadas de mejor a peor —excepto la sexta que no tiene aún puntuación ya que concluyó sobre el veinte de septiembre de 2017—:
3ª – 100%
2ª y 5ª – 80%
4 – 71%
1 – 68%

Total, una serie que gustará a los fans de «Sobrenatural», «Buffy cazavampiros» pero que busquen más la parte de acción aunque no gustará a los que no gusten de tramas adolescentes. En mi opinión es una buena serie que falló al introducir temporadas de veinte episodios y que aunque yo iba a poner un siete al final tendré que ponerle un seis y medio que redondeando hacia arriba es un siete.