Chris Fisher conocido por «Donnie Darko: la secuela» o «Dueños de la calle 2: Motor city» además de un puñado de series de televisión dirige con guion ajeno que es adaptado de una novela «Conociendo el mal», una película sobre un hombre al que últimamente no le va bien y que se dará de bruces con un individuo algo desequilibrado con el que terminará haciendo dos viajes, uno interior y otro exterior. Entre los protagonistas tenemos a Luke Wilson conocido por «Idiocracia» o «Aquellas juergas universitarias» que interpreta al padre de familia; a Samuel L. Jackson conocido por «Unthinkable» o «Pulp fiction» que interpreta al desequilibrado; o a Leslie Bibb conocida por «Hell baby» o «The babysitter» que interpreta a la mujer del primero.

Se trata de un thriller con elementos de misterio, suspense y drama que gira en torno a un hombre que se ve obligado a transformarse poco a poco para poder salvarse de las manos de un energúmeno al que le importa una M mayúscula todo lo que le digan y que a la primera ya está regando la zona de cadáveres. No tengo mucho más que decir.

La parte actoral está bien, Samuel como viene siendo habitual de reclamo total, quiero decir que película en la que sale película que probablemente vea si tengo que decidir entre dos. Y Bibbs aunque alejada de la comedia que se le da tan bien también tiene alguna escena algo graciosa.

No tiene metascore pero tomatá un veintidós con muchas críticas negativas que dicen, por ejemplo, que es muy exagerada, que está sobredirigida, que no tiene una buena banda sonora o que es otro incompetente thriller directo a vídeo. Alguna positiva dice que si no te importa que tenga más estilo que calidad o que Samuel reparta mamporros entonces te gustará. A mí dentro de que no es nada del otro mundo la verdad es que no me ha parecido tan mal y me tuvo entretenido durante todo lo que duró.