Cruella es ese live action que tenía que hacerse desde el principio, esto se debe principalmente al tono tan oscuro que se mantiene durante todo el largometraje, pero sin dejar de tener más infantiles, es una combinación que pudo resultar muy mal pero que afortunadamente por la buena dirección de Craig Gilliespie quien fue capaz de elaborar escenas adultas, inteligentes con mucha sutileza, elegancia y sobre todo con mucha astucia para tratar de equilibrar la violencia y los temas mas complejos en escenas más divertidas, coloridas y amenas con la población mas joven.

Emma Thompson y Emma Stone son sin duda las Diosas de la actuación, porque son capaces de transmitir toda esa elegancia y perversión , sin dejar de ser personajes complejos con cualidades y defectos.
El soundtrack es el indicado para representar ese tono un poco más oscuro, esa rebeldía del personaje y para darle más estilo a la película, pero llega a un punto en el que se vuelve muy exagerado y sobrecargado, esto hace que en varias escenas el espectador no pueda apreciar bien ni la música ni la escena como tal, se vuelve una mezcla muy sobrecargada que hace que se pierda un poco el interés.

Lo otro que no funciona muy bien es la historia tan simple, predecible a pesar de que hay algunos giros argumentales decentes, en si el relato es muy plano, soso y lleno de clichés ya usados por todos lados, además los efectos especiales especialmente en los perros se ven terribles.
El diseño de producción, el maquillaje y el vestuario son majestuoso porque son capaces de darle más profundidad y hacer más llamativa la presencia del arte, en la representación de la moda.