Múltiple y genial, así es este genio incomprendido que es M.Night Shyamalan.
Su personaje en la película, un esforzadisimo James McAvoy, tiene MÚLTIPLES personalidades, hasta 23 y múltiples son las actitudes y determinaciones de todas ellas para desembocar en una personalidad final, la número 24. Esta detonará la parte más bestia y cruenta de la historia.
Hasta ahí la película funciona como un reloj. Las nuevas generaciones quizá necesiten una velocidad más pero lamentablemente no pertenezco a ese sector.
Sin embargo analizar como el director nos utiliza a su antojo con sus fueras de campo y con el manejo de los encuadres es una maravilla. La utilización de la luz y la oscuridad tiene un cariz diferente al habitual. Ya que la amenaza que late durante todo el relato es que la personalidad nº 24 abandone la oscuridad y emerja a la luz.
Lo que nos cuentan es ciertamente interesante y como veremos admite mas de una lectura sobre la verdadera linea argumental.
-El autor nos dirige hacia la historia del secuestro.
-Hacia la relación entre el personaje de McAvoy con su psiquiatra.
-Hacia las historia en dos lineas temporales de la chica.
-Hacia un enfrentamiento final entre los dos protagonistas.
Todos estas lineas se desarrollan con pulso y maestría pero para el espectador no deja de ser un film de tensión con un actor en múltiple estado de gracia.
En el último tercio el personaje de Anya Taylor Joy ( la jovencisima actriz de la estupenda "La bruja ") crece a la par que la historia referente a su pasado se intensifica.
El dolor primigenio de la personalidad 24 se enfrenta contra el del personaje de Anya Taylor, un dolor atroz que representa el asesinato de su niña interior. En ese momento es cuando los personajes evolucionan y la catarsis psicológica en la chica se equipara a la catarsis física del personaje de McAvoy.
Y así cuando la peli esta acabando tras un bestial "tour de force" entre los dos, emerge la genialidad de Shyamalan y que explicaré como no puede ser de otra manera en la zona spoiler.
No lo abras si no la has visto y la vas a ver.