Una joven sirvienta de una acomodada familia mexicana vive el día a día ocupándose de la casa y de los niños, mientras en su poco tiempo libre intenta convertirse en una mujer amada e independiente.

El director Alfonso Cuarón, autor de las notables Y tu mamá también y Gravity, filma una película dura y difícil de digerir, con una fotografía en blanco y negro magnética pero con un ritmo tan lento que acaba desesperando. Es una de esas películas que acabas viendo por aclamación popular tras las buenas críticas recibidas por profesionales y festivales de medio mundo pero que según avanzan los minutos vas dándote cuenta que te la han vuelto a meter doblada…Comparto su crítica feroz que proyecta de esas familias tan ocupadas y ensimismadas con sus trabajos que tienen hijos igual que coleccionan cromos para que luego sean otros los que se ocupen de su crecimiento y atención. Y luego que los hijos salen como salen, incapaces de amar porque nunca han recibido nada de cariño de sus padres. Escalofriante es también la relación que tiene la protagonista de la cinta, la debutante Yalitza Aparicio, con su novio…y hasta ahí puedo leer porque se me revuelve el estómago solo de pensarlo. Un tema tan actual en nuestra sociedad que habría que erradicarlo de raíz. Empero, la película está tremendamente sobrevalorada y es muy aburrida, de esas en las que miras el reloj del móvil unas cuantas veces y que los ojos de tu novia se cruzan con los tuyos varias veces y que desafiantes parecen decirte…”¿Qué pelotas me estás haciendo ver?” y “Hoy duermes en el sofá…y lo sabes”.

Sacapuntas de oro: Los planos largos y la fotografía. Dos escenas ya merecen el aprobado de la película por si misma, la del hospital por su realismo y crudeza y la final en la playa, porque eso solo lo puede hacer una madre con MAYÚSCULAS.

Sacapuntas de madera: Cuando las sirvientas hablan entre sí no se les entiende nada. La discutible moda de alabar todas las películas rodadas en blanco y negro. Que no cuenta nada diferente a lo que ya sabemos. Las cagadas de perro son una falta de respeto al espectador. La sensación de que hagas lo que hagas en la vida, nunca vas a subir de escalón social porque todo seguirá siempre igual.

Nota: 5 Sacapuntas.