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España España · Madrid
Voto de RdelHM:
9
Comedia Años 50. Villar del Río es un pequeño y tranquilo pueblo en el que nunca pasa nada. Sin embargo, el mismo día en que llegan la cantante folclórica Carmen Vargas y su representante, el alcalde (Pepe Isbert) recibe la noticia de la inminente visita de un comité del Plan Marshall (proyecto económico americano para la reconstrucción de Europa). La novedad provoca un gran revuelo entre la gente, que se dispone a ofrecer a los americanos un ... [+]
15 de mayo de 2020
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La verdad es que Bienvenido, Mister Marshall se gana a pulso su estatus como una de las mejores películas españolas de la historia. En general, toda la película tiene un gran nivel, pero quizás el guion destaca por encima de todo en un film al que cuesta encontrarle ningún defecto.

Berlanga, Mihura y Bardem se las ingenian a las mil maravillas para crear un retrato en clave de humor del típico pueblo castellano en pleno franquismo y sumido en la miseria tras la Guerra Civil. Y no es algo fácil ni común, porque en este país estamos acostumbrados a las películas y series que intentan plasmar con gracia a la sociedad española y al final acaban siendo simples sátiras atroces y casposas sobre lo peor que tiene nuestro pueblo. Pero aquí no es así. Hay humor regional y se hace referencia a muchos de los defectos que caracterizaban a la España de los 50, pero está ahí de manera inteligente, generando y lanzando críticas suspicaces como quien no quiere la cosa. Y no se olvida de dar profundidad ni sacrifica a los personajes con tal de soltar un chiste vergonzoso, no. Aquí el pueblo está vivo, la gente tiene aspiraciones, y sueños. Y tienen problemas reales. Se trata de una película coral, pero todas o casi todas las personas del pueblo están maravillosamente caracterizadas. Los personajes son muy redondos, y es muy fácil empatizar y encariñarse con ellos.

En cuanto al tema de la crítica, la manera en la que se hila y se va tramando la historia para dar leña al franquismo, a los americanos y su plan Marshall, a las clases altas, e incluso a los propios pueblerinos, es de categoría. Es uno de los grandes pilares de la cinta, pero no se hace pesado ni molesto, no da la sensación de que te intente aleccionar de forma brusca, porque está escrito de forma brillante. Y más si uno piensa que tenía que pasar la censura.

También es digno de mencionar el ritmo que lleva y el montaje. Una maravilla y bastante original para la época. Solo hay que ver los 5 primeros minutos para darse cuenta. Con qué facilidad se te sitúa y se te presentan a los personajes. Con ese narrador y varios de los recursos parece que se esté viendo un fragmento de una película de Woody Allen de 30 años después. Es fantástico. La única pega, eso sí, es que al final del segundo acto, el tema de los sueños se plantea de forma algo repetitiva y cargante. Es una parte esencial y son perfectos para dar profundidad a los personajes y fuerza al desenlace (que, por cierto, es potentísimo), pero después de ver varios a esas alturas, se puede llegar a hacer un poco cansino.

Luego, la fotografía y la producción también están muy bien. Como mencionaba antes, el pueblo está vivo, y no es solo por unos personajes muy bien interpretados por actores de la talla de Pepe Isbert a la cabeza. La plaza, el campo, las clases... Realmente Berlanga y su equipo conocían lo que se traían entre manos.

En definitiva, un clásico con título merecido, divertido, con ese puntito de drama tras la crítica y el humor, y que te deja con un gran sabor de boca
RdelHM
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