Maravilloso corto, quizás uno de los más bellos que haya podido ver.
En este periodo estoy viendo los cortos premiados a lo largo de los años y quizás sea el más bello que hasta ahora haya podido ver además de original.
Hay gente especializada en esta técnica y algunos de los resultados son espectaculares.
Empezando por la técnica de elaboración es maravillosa, sencilla y sutil, delicada y todo ello impregnada de ternura, una ternura que hipnotiza pues el corto tiene algo que te atrapa desde el primer instante.
La música es una gran elección, ayuda sin duda al ritmo de corto pero lo mejor no es la música sino el conjunto y la historia que este corto cuenta y de cómo la cuenta, ahí radica su grandeza.
El pasar del tiempo y donde el recuerdo de los padres está siempre presente en cada una de las etapas de nuestra vida, desde la infancia, la adolescencia y la vejez, el recuerdo de los padres estará siempre presente y su búsqueda también.
El fondo humano del corto es increíble, el corto está tratado con una sensibilidad sin igual, el valor de la familia, el pasar del tiempo...un sin fin de cosas, es la gran dificultad de esta técnica, saber contar mucho en poco tiempo y este corto lo consigue, quizás de los ocho minutos más bellos que haya podido ver.