La película que narra la ya conocida leyenda de Pat Garrett y de Billy el niño es adaptada por el peculiar Sam Peckinpah que como siempre dirige con sus habituales características, vicios o excesos. Así, violencia y mucha cámara lenta en varios tiroteos, una escena en la que cuatro o cinco tías aparecen desnudas y unos personajes muy característicos de su obra.

Pero esperaba más. No es de lo mejor que ha dirigido el director. Tanto en western ("Grupo Salvaje", "La balada de Cable Hogue", "Duelo en la alta sierra", "Mayor Dundee") como en otros géneros ("Perros de paja", "Quiero la cabeza de Alfredo García", "La huida") tiene mejores películas que la que nos ocupa. Aquí, aparte de hacer uso de sus características, dirige de manera correcta, sin muchos alardes. Hacía mitad tiene bajones que hace que en algunos momentos aburra. Pero por lo general nos encontramos ante una película entretenida pero de la que uno esperaba más.

Esta película muy masculina cuenta con muy buenas actuaciones. Así James Coburn realiza un genial papel, siendo el mejor de la película. Kris Kristofferson se encuentra comodo y realiza un buen papel. Jason Robards está muy breve al igual que los demás secundarios pero correctos. En cuanto a las chicas que aparecen son objetos más que otra cosa. En cuanto a Bob Dylan, hablando como actor, es lo peor de la película sin lugar a dudas. Su personaje es el menos interesante y que el director se podría haber ahorrado. Como músico realiza un buen trabajo aunque comparto la opinión mencionada en una crítica anteriormente que con otro compositor probablemente más del estilo de Peckinpah hubiera quedado mejor.

Película entretenida, no más. Algo larga y excesiva pero con momentos notables (su final es bastante bueno). No es de lo mejor que ha dirigido Peckinpah pero es una buena película. He visto la versión del director que supongo, por lo oído, que es mucho mejor que la que salió en los cines.