Descomunal, triste, terrorífica y ante todo una obra audiovisual impactante de calidad y contenido que alcanza cotas inimaginables de lirismo, que logra algo a lo que muy pocos productores ni en sus mejores sueños podrían llegar a alcanzar. Me refiero a realizar un digno tributo para todas las víctimas del fatídico incidente, una recreación realizada con feroz verosimilitud apoyada con un contundente rigor científico detrás y al mismo tiempo un material audiovisual que más que entretener, sorprende al respetable, literalmente lo golpea con cada capítulo hasta dejarlo "noqueado", sin respiración, sin aliento, devastado emocional y psicológicamente. Nos convierte en un mudo testigo de una negligencia (o accidente) que nos lleva en primera fila a contemplar el horror REAL en su estado más puro. Un horror que duele, porque lo podemos casi que sentir en nuestra propia piel.

Desoladora miniserie (5 capítulos de 60-72 minutos aprox.) en los que veremos una recreación (tal vez demasiado) realista de uno de los días más tristes y catastróficos del siglo pasado: El 26 de abril de 1986, la Central Nuclear de Chernóbil, ubicada en Ucrania (por Dios santo, cuanto más seguirá sufriendo este pobre país) sufrió una explosión masiva que liberó material radioactivo en zonas de Escandinavia y Europa Central. Cada capítulo explora dicha tragedia desde varios puntos de vista y las acciones de los principales implicados.

Brutal, cruda, cruel inclusive, pero se agradece a los productores (entre ellos Craig Mazin) que hayan tenido la valentía de llevarla a cabo, tomando como referencia el libro "Voces de Chernóbil" escrito por Svetlana Alexievich, en dicha obra se incluye testimonios reales de quienes vivieron en primera persona el nefasto acontecimiento. La fidelidad se mantuvo a rajatabla durante la producción, confirmando en toda su grandeza el enorme músculo que tiene HBO.

Excelente en todo sentido y tiene un reparto de lujo que incluye a Stellan Skarsgård, Emily Watson, Jared Harris y Jessie Buckley.

Poco más que añadir sobre una Obra Maestra de visionado obligatorio me atrevo a asegurar.