Ya pasan más de dos décadas desde que Payne nos deslumbrara con su, creo, hasta la fecha mejor película: ENTRE COPAS. Su trayectoria está siempre jalonada de un buen gusto patente a la hora de contar historias, con ligeros pero continuos altibajos, entre los que destacan la notable NEBRASKA o la muy a tener en cuenta LOS DESCENDIENTES, y obras menores como ELECTION o A PROPÓSITO DE SMICHDT.

En cualquier caso, un director artesano, capaz siempre de sacar partido de sus actores, a los que elige siempre con gran acierto.

Aquí, gran parte del buen funcionamiento de la película se debe a la elección del trío protagonista (magníficos Giamatti y Da'Vine Joy Randolph), además de saber crear una atmósfera nostálgica muy del cine clásico de toda la vida, adornado con una historia muy navideña sabiamente concebida.

Todo funciona en la película y los personajes evolucionan todos de forma previsible y muy fluida, haciéndose querer por parte de los espectadores. Los diálogos son ingeniosos y suenan a verdad en labios de unos actores que hacen creíbles sus personajes.

Una película pequeña, bonita, que se ha colado en los Globos de Oro y en los Oscar de forma merecida.