Esta película está bordeando constantemente la frontera de ser asombrosa pero no llega a traspasarla. Se queda sencillamente en curiosa.
Muchos críticos comparan a Fatih Akin con Sidney Lumet. Es verdad que hay un aroma parecido en el filme pero desde luego no llega a su talento para desarrollar la trama.
Hay escenas que son tontas y que cuando parecen que van a enderezar el rumbo y ofrecerte algún giro atractivo, te devuelven al punto de partida.
Si bien Diane Kruger es una actriz fantástica, su personaje no está bien diseñado. Del resto de personajes apenas sabemos nada.

En resumen, la nota que tiene en filmaffinity se ajusta perfectamente a mi opinión. Una obra interesante pero a la que le falta ese salto que la convertiría en algo excelente.