Los habitantes de un pueblecito mexicano son asaltados regularmente por Calvera (Eli Wallach) y sus secuaces. Tan solo son humildes campesinos a los que roban, dejándoles únicamente un poco para poder ir malviviendo hasta el siguiente saqueo.
Hartos de ver cómo su esfuerzo se esfuma y sus hijos crecen con hambre, un par de hombre cruza la frontera con Estados Unidos para con 20 dólares comprar armas y así defenderse de los bandidos.
Al cruzar la frontera asisten al frustrado intento de entierro del viejo Sam, un indio a quien sus vecinos no quieren en su mismo camposanto. Pero la irrupción de dos hombres en este escenario, hace que a punta de pistola se consiga llevar al viejo por fin al cementerio.

Con una B.S.O. convertida en un clásico de la historia del cine a cargo de Elmer Bernstein y una historia basada en “Los siete samuráis” de Akira Kurosawa, John Sturges rodó este Western, que si bien para algunos puede estar más o menos arriba en la lista de los mejores westerns de la historia lo cierto es que es uno de los que más estrellas tiene en los papeles principales, comenzando por el pendenciero Elli Wallach, los Magnificos Yul Brynner, Steve McQueen, Charles Bronson, James Colburg, Robert Vaughn. Además están el genio musical Elmer Bernstein que tantas bandas sonoras inolvidables nos dejo, como ejemplo esta. Charles Lang, director de fotografía que gano un Oscar y estuvo nominado 18 veces y por último John Sturges, que si bien no es tan conocido como John Ford , Howard Hawks o Henry Hathaway , dirigió algunos de los mejores westerns de la historia además de este, como “Duelo de titanes” 1957 o “El último tren de Gun Hill” 1959.

Si tuviese que destacar algo sería la escena del cementerio, pero además, el carisma de Brynner, McQueen y compañía, los maravillosos acordes que acompañan toda la película, unos bellísimos escenarios naturales y un ritmo constante a lo largo de toda ella. Con una historia simple, pero para nada simplona se consagra como un gran western.