Una de las principales críticas a Scream 3 es la falta de originalidad en comparación con sus predecesoras. Aunque las primeras dos películas de la serie fueron innovadoras y revolucionarias en el género del terror, Scream 3 se siente repetitiva y casi como un intento de exprimir el éxito de las primeras entregas.

La trama de la película también presenta algunos agujeros y giros de la trama predecibles que pueden decepcionar a los espectadores. Además, la calidad de las actuaciones en general no alcanza el nivel de las películas anteriores, lo que puede hacer que los personajes parezcan planos y poco interesantes.

Sin embargo, Scream 3 todavía logra mantener ciertos elementos de suspenso y sorpresa, lo que genera momentos de tensión y entretenimiento para aquellos que disfrutan del género de terror. Además, el manejo del humor negro y las referencias a otras películas de terror siguen siendo uno de los puntos destacados de la saga.

En general, Scream 3 es una película entretenida que puede disfrutarse si eres fanático de las películas anteriores. Aunque no alcanza la calidad de sus predecesoras, todavía logra proporcionar algunos sustos y momentos de diversión.