Pese a parecer superficial, atropellada y confusa en su inicio, no cabe duda de que Verhoeven siempre dota de personalidad a sus películas con violencia, algo de humor y erotismo (aunque en esta ocasión brilla por su ausencia). "Robocop" no es una excepción y, además, consigue que en ningún momento te aburras. Si bien en algunos aspectos ha quedado anticuada (esos movimientos del prototipo robótico son casi risibles con los efectos actuales), la historia es original e ingeniosa y sobre todo, crece a partir de los recuerdos no controlados para su borrado que comienza a tener Murphy.
Mi nota: 7,6