Media votos
5.8
Votos
1,470
Críticas
1
Listas
6
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Dudu A:
2
5.9
2,547
Drama
Un periodista deportivo irlandés está convencido de que las victorias del ciclista Lance Armstrong en el Tour de Francia se deben al dopping. Con esta convicción, empieza a investigar y a buscar pruebas que sacarán a la luz la verdad sobre Armstrong. (FILMAFFINITY)
22 de junio de 2016
18 de 32 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pensaba negarme a ver una película destinada a ensalzar la figura de David Walsh, actual palmero del equipo Sky pero al final he caído.
La película no es, en el fondo, sino una recopilación de anécdotas casposas contadas a ritmo de videoclip barato que perfectamente podrían pasar un sábado por la tarde en Antena 3.
Los personajes tienen la profundidad psicológica y la empatía emocional de una servilleta de bar de carretera y difícilmente empatizarás con ninguno.
Armstrong es un personaje siniestro, turbio y grotescamente malvado. Creo que no me quedo corto si digo que nos encontramos ante uno de los grandes villanos de la historia del cine. Bruyneel es un pobre pelele imbécil y arrogante en manos de una máquina de manipulación como Lance y Landis es un niño bueno que trata de complacer a su familia mormona pero al que lograron engañar debido a su ingenuidad.
Con David Walsh, nos encontramos ante un héroe de dimensiones bíblicas que salvó a ese deporte envenenado que es el ciclismo pero que atesora el tesón, la valentía y el coraje necesario para salvar el mundo.
Casi al final, aparece Alberto Contador y es un pobre hombre, feo y medio lelo que ni siquiera sabe hablar bien español. Me reí mucho.
Debería haber dedicado este tiempo a hacer algo más productivo como observar el tráfico.
La película no es, en el fondo, sino una recopilación de anécdotas casposas contadas a ritmo de videoclip barato que perfectamente podrían pasar un sábado por la tarde en Antena 3.
Los personajes tienen la profundidad psicológica y la empatía emocional de una servilleta de bar de carretera y difícilmente empatizarás con ninguno.
Armstrong es un personaje siniestro, turbio y grotescamente malvado. Creo que no me quedo corto si digo que nos encontramos ante uno de los grandes villanos de la historia del cine. Bruyneel es un pobre pelele imbécil y arrogante en manos de una máquina de manipulación como Lance y Landis es un niño bueno que trata de complacer a su familia mormona pero al que lograron engañar debido a su ingenuidad.
Con David Walsh, nos encontramos ante un héroe de dimensiones bíblicas que salvó a ese deporte envenenado que es el ciclismo pero que atesora el tesón, la valentía y el coraje necesario para salvar el mundo.
Casi al final, aparece Alberto Contador y es un pobre hombre, feo y medio lelo que ni siquiera sabe hablar bien español. Me reí mucho.
Debería haber dedicado este tiempo a hacer algo más productivo como observar el tráfico.