De casualidad y sin saber muy bien qué encontraría, topo con esta soberbia película, de las que puedes llamar "cine" que te cuenta una historia redonda, dura eso sí, con una presentación de personajes, un desarrollo y una conclusión, perfectamente dirigida, perfectamente interpretada (esa Diane Lane que nunca falla y un Kevin Costner perfecto), con una bonita fotografía y acompañada de una música como parte imprescindible.

Leí por aquí, muy acertadamente, que era una muestra de la América profunda a través de una familia herida y otra podrida, y añado yo que hay una tercera familia, la aniquilada, la del chico indio al que arrancaron del corazón de su familia para borrar su memoria, su idioma, sus tradiciones, sus costumbres y hasta su nombre. Y a fe que lo lograron. Por desgracia. Y no solo en la película. Qué dura la América profunda, la real.

Es una película con mensaje, con denuncia, una explicación de por qué las cosas en USA, y no solo allí, son como son, con ese sheriff apoyando, o quizás temiendo, a la familia podrida, con ese desenlace que se podría haber evitado si no se permitiera a los poderosos serlo tanto.