Cintas como ésta no llegan todos los días, y de las pocas que llegan, su mayoría son bastante pretensiosas; pero creo que en esta ocasión nos encontramos ante una genuina obra maestra que expone la violencia de una manera demasiado gráfica y evidente, pero que funciona a la perfección.
David Croneberg logra un trabajo maravilloso y logra desarrollar una historia de violencia, mas no violenta; y lo logra sublimemente. Las actuaciones son gloriosas en particular la de William Hurt, quien tan solo con diez minutos en escena, logra una interpretación que te pone los pelos de punta. Viggo Mortensen y Maria Bello tambén están maravillosos.
Simplemente maravillosa.