"Cat People" es una de esas películas por las que no pasa el tiempo. El autor de la fabulosa "Out of the past" transforma una cinta de Serie B y de ínfimo presupuesto en una obra de calidad suprema. Uno de los aciertos del filme es su sutil aura de misticismo y temor que se precia durante todo el metraje, en lugar del uso de grandes efectos espaciales tan habituales en el genero.

El argumento a priori parece sencillo. Un arquitecto estadounidense se encuentra en el zoológico con una hermosa mujer que se encuentra dibujando una pantera en su cuaderno. El idilio entre los dos no se hace esperar y terminan consumando el matrimonio. La escena donde él le regala el gato y éste lo rechaza ya nos hace sentir que algo va mal. A partir de ese momento ya notamos que algo no marcha bien en la mente de Irena. La joven diseñadora de moda es incapaz de ser feliz, vive un tormento permamente, obsesionada con los grandes felinos y de convertirse en una mujer pantera, temiendo destruir a quienes más ama, convirtiéndose en una novia extremadamente celosa.

La sutil ambigüedad de la que hace gala el director francés es sublime, jugando en todo momento con el espectador sin que sepamos por qué la protagonista tiene ese comportamiento Torneur se preocupa por mostrarnos los miedos, obsesiones, angustias y sentimientos reprimidos que contiene la particular mente humana. La película flota entre el drama psicológico y romántico, con mezclas de thriller y terror.

El director galo demuestra ser un maestro a la hora de plasmar atmósferas amenazadoras e inquietantes sin necesidad de ningún tipo de artificio. Para ello se ayuda de la fotografía excelente en blanco y negro a cargo de Nicholas Musuraca, con un magistral uso del juego de sombras.

Cuando acaba la obra el director nos deja varias preguntas sin resolver:
- ¿El comportamiento de Irena es fruto de la obsesiva creencia de las supersticiones de su Serbia natal?
- ¿Es una joven reprimida por algo que le ocurrió en su pasado?

Lo que no se pregunta el espectador es si estamos ante una película inolvidable e imperecedera. O no debería, vaya. Obra maestra absoluta.