Cuantas veces ante grandes producciones, que repiten y repiten e imitan hasta la saciedad la temática y la supuesta fórmula de éxito de otros films anteriores, héroes de Marvel, mundos de fantasía, salgo del cine pensando... si en vez de haber gastado tanto dinero en efectos especiales y artificio, lo hubieran dedicado a pagar a un mejor guionista, a la dirección de actores, quien sabe si....

En la fórmula prescrita se indica que el film ha de contar con actores, de demostrada solvencia, conocidos por el gran público. Aquí son Charlice Theron, Ben Kisgley, Laurence Fishburn y Michele Yeho los encargados de servir de reclamo para el gran público, pero, raramente cuando a un buen actor, no se le aporta un buen guion, complicado lo tiene para brillar, a pesar de su magnetismo ante la cámara y, todos los mencionados, lo tienen.
Es tal la profusión de películas harry poterianas basadas en novelas que, con mayor o menor fortuna, se imitan entre sí, que es difícil ver algo nuevo, sorprendente, las imágenes se repiten, y, cuando uno hace memoria de lo visto, confunde. Ya no sabe si el animal, el profesor, el amigo, el compañero malvado, etc, corresponde a una película u a otra. Cansa.
Lo curioso es que el director, Paul Feig, es un reconocido guionista, entre sus trabajos figuran aquellos en la serie "The oficce", este fue uno de los motivos que me impulso para ir a ver el film. Pero, como me suele pasar con muchas de estas grandes producciones, me parece que la productora se ha impuesto sobre el posible ingenio.
Los decorados recuerdan mucho, demasiado a Hogwarts, ese barroco británico, la atmosfera no dista mucho de Animales Fantásticos, a veces puede recordar el de Peter Jackson y sus películas de Tolkein...El mundo de fantasía que se nos crea es demasiado deja vu. Es que hay un momento con ¿espadas láser?, lo dicho, poca imaginación es la que se nos ofrece.
La historia de amor, los celos, la amistad puesta a prueba por un mismo amor o un mismo gusto, de las protagonistas hacia el chico y como este responde ante ellas, de nuevo, es muy manida....

Acabo con algo que, supongo, los productores, no sé si el autor de los libros, no los he leído, o quien ha pensado que es ¿inteligente?. La mala es blanca, la buena negra.... invirtamos las cosas para así tener más audiencia y mostrar.....no sé muy bien que se quiere mostrar.

Resumo, nada nuevo bajo el sol, demasiado visto y obvio, qué pena tanto dinero gastado en efectos especiales y tan poco en guionistas y libertad para la dirección y el vuelo de la imaginación.