Aquí es donde por fin puedo explayarme un poco más:
-Bien voy al cine con mi billetitos en la mano para gastármelo honorablemente en mi entrada, e invito a mis amigos, pues es mi cumple ¿y qué me encuentro?
Que la versión de "Ex machina" que era la que yo quería ver, está puesta a las diez de la noche en una única sesión. Y por supuesto mi sentido común, y mi dignidad de mujer junto con el poco interés que despiertan en mí historias como ésas, me impiden ir a pagar para ver algo como 50 sombras de Grey. Entonces decido ir a ver "Chappie", total era de la misma temática de la que a mí me interesaba en un principio.
-¿Qué me encuentro ? Con un robot policía cuya inteligencia para él fue creada por un genio hindú (al que Lobezno que mira tú que casualidad trabaja en el mismo laboratorio que él) odia con toda su alma. Contra las órdenes de su jefa Sigourney el tío hindú descarga la consciencia artificial en el robot, pero qué mala suerte. Por el camino unos drogatas le roban al hindú el robot pensando en utilizarlo para dar el asalto del siglo con su sofisticada tecnología. Muelen a palos al creador, que cual Victor Frankenstein desesperado se vuelve a su agujero, prometiendo volver, mientras el bebé Chappie adquiere consciencia siendo un macarra, un delincuente y llamando "papá" y "mamá" a un cuarentón acabado perdido de droga y de desesperación por no poder pagarle a su jefe, un loco que tira misiles a todo Dios, y a una especie de mujer gnomo con el pelo teñido de blanco que lo adopta. Al final su creador vuelve, y resumiendo, lo hieren los malos de Lobezno. El robot fíjate si es listo, en vez de llevar a su creador herido al hospital, donde sí se podía haber salvado, lo deja morir y descarga su consciencia en otro robot policía que estaba tirado en el laboratorio, luego hace lo mismo con la consciencia de su madre enana.
Todos los humanos acaban muertos y los robots son una gran familia. Sí señor, gran película. Es tan penosa, tan penosa, que Hugh Jackman me caía el mejor de todos. Y es el villano, no te digo más...no pierdas tu tiempo, es una porquería con la que echas cuatro risas pero no es digna de pagar por ella al menos en el cine.