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España España · La Font d'En Carròs
Voto de Andreu Todo:
8
Terror. Thriller Böhm interpreta a psicópata que fotografía a sus víctimas mientras mueren; es un hombre profundamente perturbado, cuyo desequilibrio hunde sus raíces en la infancia. Su padre, un científico obsesionado por estudiar las reacciones infantiles ante el miedo, destrozó su psique y lo convirtió en un adulto acomplejado y afectado por una demencia demoníaca. El personaje necesita registrar en imágenes el terror que sienten sus víctimas antes ... [+]
15 de abril de 2024
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Y es que la clave de la película está en la reflexión metafílmica acerca del vouyerismo que supone el mero hecho de encuadrar, de filmar y, como no, el acto del visionado. Hay paralelismos claros que equiparan la cámara (que empezaba a popularizarse en la época) a un instrumento de perpetuación de una monstruosidad obsesiva y calculada y a la cinefilia como una pulsión enfermiza. Además de otras cuestiones psicoanalíticas quizás se deja entrever que el relato o la palabra, además del tiempo, puedan ser un posible acto de sanación.

A pesar de la incomodidad de ciertos momentos no deja de sorprender el sentido del humor que maneja. Y llama la atención cómo juega con la no presencia del padre, que siempre está ahí de alguna manera con la huella imborrable que dejaron sus actos. El padre, el científico, aquél que proporciona el sustento técnico que propicia el invento.

Formalmente ofrece un repertorio de movimientos de cámara, travellings, primeros planos, juegos con la luz, color, el espejo que refleja el miedo… y todo con un sentido narrativo. Una película muy bien realizada, que mantiene en todo momento el pulso y la tensión y que tiene un final absolutamente genial por funcionar dramáticamente pero también por ser coherente con el planteamiento de situar al espectador más allá de la ficción con ese plano de la cinta que se detiene.

Un film que reflexiona acerca de la masificación en el consumo de imágenes y la posesión de los cuerpos femeninos a través de su plasmación compulsiva. Una pulsión por la imagen que Powell atribuye a cualquier realizador, incluido él mismo, y que demuestra dejando un buen puñado de instantáneas imborrables en el film.

@laquimeracultural
Andreu Todo
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