Creo que si se quitaran todos los momentos musicales que ayudarían a recortar metraje, que creo sincermente que le sobra, y el curso de la historia no estuviera tan forzado, incluso podría quedar hasta una buena película de entretenimiento. Pero es muy floja, creo que se pierde, primero quiere ser una película de atracos, luego una de carreras de coches ilegales y luego las dos cosas a la vez.
Al final ganan los buenos (la chica que deja a su novio para tirarse a otro más cachas, y el tío cachas que está forrado o si no, ya tiene a su ex para engañarle como a una pedorra) y pierde el malo malísimo Alberto Ammann (madre mía, supongo que cobraría su caché íntegro para aceptar un papel así), que es un egoísta de tomo y lomo.
En fin. Una peli mala.