Continúa la serie en una segunda temporada que no solo mantiene el nivel sin problemas, sino que además mejora incluso un poco, generando varias escenas con un punto emotivo para los seguidores de este universo y que valen mucho la pena.

Continúa el mismo camino de entretener, mostrar buenas escenas de acción, un buen equipo que contrasta en dureza y ternura como Mando y el pequeño, y el apartado artístico continúa siendo sobresaliente.

Básicamente lo mejor de Star Wars desde que Disney compró la franquicia junto a Rogue One y una sorpresa agradable en la que se nota en mimo que tienen Jon Favreau y Dave Filoni trabajando en ella.