Katie: es una joven princesa de un país-pueblo de unos 55 habitantes

Jack: es un tío súper buena gente, que era millonario, tenía un máster de administración de empresas y se dedicaba a agente inmobiliario, tenía mucho éxito pero era muy gruñón y tenía una prometida con la que se iba a casar, pero un día se miró al espejo y dijo, ¿qué coño? voy a cambiar de vida, así que se compró una furgoneta y se hizo carpintero,ahora se dedica a reformar casas y arreglar alguna que otra luz de navidad, se arruina y al final su prometida lo deja porque no quería estar con un don nadie, pero ...a quién no le ha pasado lo mismo, es algo muy común, mi vida me va tan bien que quiero destrozarla.

Tía de Katie: es algo parecido como la bruja de los 101 dálmatas

Hermana y cuñado de Jack (periodista fracasado): un periodista del tres al cuarto que quiere llegar lejos con una noticia, encontrar a la princesa a la fuga, y bueno antepone el trabajo a la familia, y el final se queda como Adán en el paraíso, con una mano delante y otra detrás.

Guardaespaldas: según las pintas dos ex-agentes del mossad pero en plan inútiles

Jubilados: unos vecinos de Jack y amigos, que están jubilados y hacen trucos de magia y todo eso, te sacan una moneda de la oreja y te meten en un armario y desapareces o bien no sales de ahí.

Historia: Katie viaja a New York para asistir a una obra de teatro, de buenas a primeras decide fugarse a la gran ciudad para pasar un día de navidad fuera como una persona normal, sin escoltas, sin protocolo, sin nadie que le tenga que decir lo que ha de hacer... y a los 5 minutos de estar en la calle, unos ladrones compenetrados, con el viejo truco de "¿me haces una foto con mi cámara para mi familia?" algo como el timo de la estampita, le roban su bolso y su cámara, entonces es donde entra Jack a perseguir a los ladrones, pero sin éxito intenta ayudar a Katie porque la ve que está más perdida allí que Marco en el día de la madre, total que le deja algo de dinero para coger un taxi que la lleve al hotel y se despide; por la noche Jack sale de la casa de la hermana y "casualmente" se encuentra a Katie en frente de la casa de "los jubilados", suele pasar, New York es una ciudad pequeña, voy al grano y me salto a los guarda espaldas y el periodista fracasado, el le dice de entrar en la casa y hace amistad con jubilados, se cogen cariño y poco a poco Katie se enamora de Jack, total que al final termina esa pequeña historia de amor sabiendo que Kate es una princesa y despide de Jack y vuelve a su país, así que ella con cara entristecida sale a ver a su gente y ta chán¡ se encuentra allí a Jack por sorpresa y más o menos le pide matrimonio, le dice que quiere pasar 100 navidades con ella, se me saltan las lágrimas de lo emotivo que estoy, y ella le responde, ¿y porqué no todos los días? y colorín colorado, este cuento se ha acabado.

lo mejor: la gente del país-pueblo, que a alguno que otro se vio repetido en New York
lo peor: casi todo, pero una escena clave, ¿que pasó con la cámara de fotos que le regaló la madre a Katie cuando era pequeña y se la robaron? nuestra princesa no tuvo ni la mínima preocupación por un regalo de su madre fallecida, y no se supo luego nada de los ladrones ni de la cámara de fotos.