Me mantengo alejado de los productos audiovisuales de los últimos 7 u 8 años por razones que todos ya sabemos. Pero cuando leo que van a adaptar nuevamente "Jerusalem's Lot" de Stephen King no podía evitarlo.

Hice un intento de ver Chapelwaite, serie de terror, porque me encanta el relato de Stephen King en el que está basada... y solo en el primer capítulo, el protagonista es viudo de una mujer asiática, tiene 3 hijos multirraciales con ella (nada de eso aparece en el relato) y cuando llegan al pueblo y la gente los mira, los niños le preguntan por qué los mira la gente... "porque sois diferentes", les suelta el padre.

Toma ya. Finales de Siglo XIX, pueblo de Nueva Inglaterra.

Pero allá vamos:
1. La voz de Brody en plan "Soy Batman". La mitad del tiempo no lo entiendes (hablo de la versión original en inglés).

2. Diálogos modernos y acentos que no tienen nada que ver con el Maine rural de 1850, ni siquiera con el Maine rural de 2021.

3. La constante cara amargada y desagradable de la hija más joven, parece como si hubiera pisado caca de perro, durante toda la serie.

4. La agenda política de 2020 en una serie situada 170 años atrás. La gente está harta de política 24 horas al día. El cine y las series solían ser nuestro escape de la vida cotidiana.