Para el año en el que se estrenó 'Acero azul', Kathryn Bigelow ya era considerada una directora de cine más que eficiente y con esta creo que se demuestra, aunque hay películas suyas que me han parecido sobrevaloradas ('Los viajeros de la noche') o un truño como un camión de bomberos ('En tierra hostil').

La película que nos ocupa ha entrado a formar parte de la Bigelow que soporto más, formando grupo junto con 'Le llaman Bodhi' y 'La noche más oscura'; sin tirar tanto la casa por la ventana consigue resultados bastante buenos.

¿A qué se debe? Para empezar, el guion firmado por la propia Bigelow y Eric Red mezcla en una sola historia elementos de cine 'slasher' (asesinos en serie) y thriller policíaco urbano en las calles de Nueva York y el resultado es efectivo, apenas hay momentos para el respiro, sin estar libre de algún defecto que otro, aunque no muy grave.

Por supuesto, para que un filme llegue a ser medianamente bueno ayuda también que el reparto trabaje mejor que solo correcto y tanto Jamie Lee Curtis como Ron Silver llevan a cabo esa tarea, una como la bella policía y el otro como la bestia despiadada. Y hablando de actores, hay algunos por aquí que terminarían siendo rostros más conocidos por el paso de los años.

No es el thriller hecho arte como podría ser 'Seven', por ejemplo, mas creo que cuando se habla de Kathryn Bigelow no sale mucho a coalición este largometraje y, personalmente, me parece de los mejores que he visto de su filmografía. Buen libreto, buenos actores y buena banda sonora, obra de Brad Fiedel (colaborador del que era marido de la directora en aquel momento, James Cameron).