Casi diez años después del estreno de 'Pretty Woman' que supuso un éxito de la comedia romántica se pensó que volver a unir a los responsables (o culpables si la cinta no te gustó) de aquel filme dirigido por Garry Marshall. Si no se recuerda mucho esta película más de veinte años después por algo será, así que esa frase a veces errónea de "segundas partes nunca pueden ser buenas" esta vez se cumpla, aunque no sea una secuela -y sabiendo como está Hollywood, es raro que no lo hayan intentado-.

Si bien en aquel filme de 1990 sobre un exitoso hombre de negocios y una prostituta tuvo un guion bien hilado que conseguía subir el interés a pesar de que había riesgo de empacho por azúcar, esta 'Novia a la fuga' pretende repetir el éxito sin demasiado ídem puesto que parece más un producto salido del forzar el repetir lo que fue trasladado a otra historia completamente distinta, bastante peor escrita que hasta parece afectar a la química entre Roberts y Gere.

La alergia del personaje de Julia Roberts a las bodas podría haber sido un tema bastante atractivo de llevar a la pantalla. Desafortunadamente, el guion parece boicotearse a sí mismo durante la primera hora intentando demostrar vaya usted a saber por qué que el periodista autor del artículo estaba totalmente equivocado cuando realmente no lo estaba. Pasado esa hora de sin sentidos, la historia parece por fin arrancar, mas lo hace torpemente intentando descubrir la razón de Maggie Carpenter a darle a los pies antes de dar el "si, quiero" y realmente no lo deja del todo claro o, al menos, no del todo convincente. Una sucesión de escenas intentando encontrar un propósito que se quedan en nada. Más cuando lo que se viene contando parece imitar sin mucho disimulo a 'El secreto de vivir', de Frank Capra invirtiendo los roles, solo que sin la comedia ingeniosa ni la química que había en la cinta de 1936.

La mediocridad parece hasta afectar a los dos protagonistas. Donde en 'Pretty Woman' parecían ser los actores indicados, aquí no lo son por mucho que el guion pretenda parecerlo. No se siente esa magia en el ambiente cuando dos actores que parecen nacidos para interpretar a sus personajes se juntan y apenas hay alguna escena que evoque a ese sentimiento de enternecer al público como se pretende en esta producción.

El cuarteto Garry Marshall/Richard Gere/Julia Roberts/Hector Elizondo seguramente pensaron en que volverían a dar con la fórmula de la Coca-Cola, pero incluso siendo imitada, jamás será la original. Lo mismo le pasa a 'Novia a la fuga', intentaron recrear un éxito con las mismas personas y ni siquiera llega a imitar el triunfo de la cinta de 1990. Es lo que pasa cuando las cosas se fuerzan, normalmente no salen bien.