Coincido con la mayoría de las críticas ya expuestas.

Creo que la película refleja una situación real, añadiendo el porqué se llega a ciertos extremos (maneras de actuar, formas de pensar), un añadido que muchas veces, y más en lo que a este tema respecta, se olvidan de destacar cuando creo que para entender la vida de un neonazi hay que analizar su entorno y su pasado.

Solo tengo una queja, y es como simplifican el movimiento "skinhead" en la película. Ni todos los "skinheads" son de tendencia neonazi, ni por supuesto todos los jóvenes neonazis son "skinheads", tal y como pretende dar a entender la película. De hecho, la cultura "skinhead" es una cultura con unos 40 años de "historia" (desde 1969), y me parece mal que se simplifique (indirectamente) tanto en esta película. Por lo demás, genial interpretación y genial dirección.

¡Un saludo!