Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de Eduardo:
5
Drama. Comedia Johnny Marco (Stephen Dorff) es un actor de gran éxito cuya vida de excesos y lujo cambia por completo cuando, sin previo aviso, se presenta su hija de once años (Elle Fanning), fruto de un matrimonio fracasado. Johnny es una estrella de cine que vive en un lujoso hotel de Hollywood, conduce un ferrari y sale con bellas mujeres sin comprometerse con ninguna. (FILMAFFINITY)
16 de abril de 2012
Sé el primero en valorar esta crítica
Sabemos dos o tres cosas de Johnny Marco: es actor de éxito, probablemente de películas de acción, facción mamporrera, antes que de films pretendidamente intelectuales como los de la niña Coppola (de hecho, no parece ni muy culto ni muy inteligente). Se aloja en el mítico y legendario Chateau Marmont de Hollywood, donde tantas estrellas del celuloide fueron a buscar refugio y solaz. Es adicto al tabaco, las pastillas y el alcohol, y su vida discurre de party en party. Las tías se le tiran encima con las bragas en la mano, o más bien sin ellas, pero parece que el sexo ya le aburre, hasta el punto de quedarse dormido mientras inicia un cunninlingus a una beldad que, seamos sinceros, se merece un trato mucho mejor (luego hay unas animadoras que se presentan en su habitación con sus barras y sus cosas, pero también se duerme, lo cual no me extraña, porque sus ejercicios calisténicos son cualquier cosa salvo estimulantes: risibles, para decirlo claro y alto).
De pronto, la que suponemos su ex tiene mucha prisa en largarse a hacer algo (no sabemos si es a follar, a viajar a la Patagonia o a recibir clases de yoga del maharishi), y le encasqueta a su hija de once años (fascinante Elle Fanning), a la que Johnny ve poco, por no decir nada. La chica es una experta bailarina de patinaje artístico, y ambos pasean y tratan de comunicarse, con escaso éxito por parte de él. Hay una escapada a Italia para recibir un premio (sale Maurizio Nicchetti a recoger otro), luego vuelven, y la niña se va de campamento. Johnny monta en su esplendoroso Ferrari negro y, en lugar de pegarse el trompazo que todos esperamos, baja del coche en una carretera solitaria y se pone a caminar hacia... Esto nos lo hemos de imaginar, aunque yo diría que a los 200 pasos dará media vuelta y se zambullirá de nuevo en el desfile acostumbrado de pastillas, alcohol, tías, etc. O sea, Rex Reed no anda desencaminado. Lo demás, especulaciones. Puede que el personaje de Fanning sea una traslación edípica de la relación de Sofia con su famoso padre, o que de verdad le den pena los chicos ricos y mimados y haya intentado transmitírnoslo. Lo cierto es que me aburrí plácidamente y aplaudí la brevedad de la cinta (no sé qué más podía haber contado). A destacar el chiste privado que supone el encuentro de Johnny con Benicio del Toro en plan cameo en el ascensor del Chateau Marmont, una alusión al encuentro de Scarlett Johansson con el actor latino en ese mismo ascensor, donde terminaron... "atascados".
Eduardo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow