Hay quien no le gusta el color negro del cine, es una cuestión de gustos, se trata de un género que mal llevado puede resultar indigesto. En "Sin conciencia" no sucede como en otros títulos, los giros que va dando la trama suponen un aumento del interés por acabar llegando al final, por el mismo contenido. Cuenta con Walsh, maestro contrastado, y con Bogart, que algo tendrá para estar metido en tantas películas de este tipo, como detective, como malo, como bueno, pero siempre mostrando un repertorio de gestos y una manera de saber estar que por sí mismo, por su presencia, ya implica normalmente moverse en un escalón más.

Yo he tardado en descubrir el género negro y lo lamento, una película como la que acabó realizando Walsh (por lo visto se encargó al poco de que empezara Windust el trabajo, y suerte de ello) merece toda la atención, por la enorme variedad de personajes secundarios y porque la atracción que genera aumenta con los minutos. Hay un enorme flash back que creí que lo estropearía todo porque, atención, incluye otros flash backs menores, sin embargo la narración no se altera en absoluto, incluso sale beneficiada. La historia incluye criminales malísimos pero sobre todo un ambiente de miedo generalizado por el más malo de todos que es el gancho que ha podido conmigo.

Cine de calidad, cine negro de calidad, muy recomendable.