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España España · Barcelona
Voto de Tithoes:
3
Ciencia ficción. Thriller Una madre soltera intenta liberarse de una misteriosa organización que la tiene secuestrada. (FILMAFFINITY)
11 de abril de 2018
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo mejor: la muestra de entornos valiéndose de planos en trescientos sesenta grados y vista subjetiva demuestra la habilidad de Steven Shainberg para adaptarse a las últimas tendencias, no siendo esto suficiente para convencer al público más innovador al aludir continuamente a soporíferos clasicismos (la lección de que no hay nada más humano que el miedo implora rechazo y el intento de disfrazar una historia de invasiones con vacíos fundamentos evolutivos demanda lo que encuentra, bochorno); el protocolo seguido por ciertos investigadores resulta en un primer momento fascinante (en último término redundante e indigno), recurriendo a las fobias (a arácnidos, a las alturas, al agua...) de los veinte humanos reconvertidos en pacientes al creer que poseen mayor potencial que el resto para lograr algo excepcional en ellos y que el terror ocasione un cambio en su material genético para, así, reestablecer el orden universal tras crecer en número, salvando de este modo al planeta de su eterno mal, los propios terrícolas; el código “G1012X” y su trascendencia (aunque la misma se revele de manera engañosa e imprevista) mantiene en alerta al espectador en aras de averiguar su significado, decepcionando a la postre al relacionar neciamente el tacto dérmico con otra sensitiva raza.

Lo peor: el profesional seguimiento que propicia el secuestro de alguien que deja abierta su casa para que cualquiera irrumpa en la misma es excesivo e incomprensible, mas ocultar cámaras en lámparas y microbombas en neumáticos se presume un control no desmesurado sino ilusorio, propio de la ciencia ficción en la que se circunscribe la cinta; la convivencia entre reclusos en un experimental laboratorio es nula, no siendo comprensible al tratarse de un propósito como el relatado, tanto o menos como que media película sea de desenfrenada fuga sin destino por interminables pasillos y conductos de ventilación que comunican todas las estancias de un recinto carcelario para facilitar la misión de huida a ciegas y confiar en otros conversando distendidamente en semejante tesitura, lo cual también ocurre para desesperar todavía más; la multitud de deslices, tales como desvestir a una víctima y permitir que mantenga su calzado para ocultar en él lo que precise, responder a impertinentes interrogatorios sin cuestionarse por qué se están llevando a cabo, instalar cerraduras de triple protección sin asegurarse de la correcta clausura de la puerta, poder deshacerse de potentes ataduras sin apenas esfuerzo al no emplear los típicos imanes de las contenciones psiquiátricas (por desgracia un servidor los tiene muy presentes en la unidad de neurología en la que presta servicio como Técnico en Curas Auxiliares de Enfermería) sino a simples nudos..., en definitiva, pinceladas ilógicas que tienen más delito que el propio acto criminal que se perpetra con enorme planificación.

Daniel Espinosa
www.cementeriodenoticias.es.tl
Tithoes
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