Parece ser que en general esta es la que menos gusta de la trilogía, pero yo me desmarco y tengo una opinión completamente distinta.
Creo que es la mejor porque por primera vez tenemos acción de verdad, no como en las otras. El humor me resulta mucho más efectivo también. En otras palabras, que con las otras no me río y con esta sí. También tenemos un malo de verdad, no como los mamarrachos de las otras dos. Incluso por primera vez hay un argumento más o menos sólido (que puede ser flojo, pero es mejor sin duda que en las dos mediocres predecesoras).
Tiene escenas muy divertidas, como los gordos haciendo “playback” de Diana Ross, la persecución en el coche desmontado, cuando se viste de elefante con los niños negros, o las armas de la “boutique” de la supervivencia.
En cuanto a la acción, normalita, pero es que en las otras prácticamente no había nada. Eso sí, lo de la araña del parque de atracciones sí que está bastante bien. Por cierto, que yo juraría que Axel se le cuela al mismísimo George Lucas (si no lo es, es un doble clónico).
Se echa un poquito de menos a Taggart, pero es verdad que por su edad no sería creíble que siguiera trabajando como policía, algo que en muchas películas no se tiene en cuenta en absoluto.
Pero sin duda, el secundario más entrañable que podemos ver aquí es al “famoso” chino con barba, calva y melenas (aunque esto parezca contradictorio) que durante los 80 y 90 salía en infinidad de películas de acción para morir a los pocos segundos. Cada vez que le veo me invade la nostalgia y me parto de risa. Este hombre seguramente ha muerto más veces en el cine que Sean Bean y John Hurt juntos.
Ambientar la historia en un parque de atracciones da mucho juego. Al principio parece ridículo, pero luego hay muchas situaciones distintas en las atracciones que le dan variedad y originalidad a una película que de por sí es policíaca. Así también tienen una excusa para que aparezcan dinosaurios, que por aquellos entonces no podían estar más de moda.
Por todo lo que dicho, es más divertida y buena que las otras dos juntas, a pesar de que muchos piensen lo contrario. Más o menos a partir de esta película, comenzó la brutal decadencia de la carrera de Eddie Murphy, al cual no le duró demasiados años su éxito. Curiosamente esto mismo les ha pasado a muchos actores cómicos americanos: unos cuantos años de “boom” y luego nada.
Por cierto: “¿Quiere alguien quitar esa jodida canción?” ¡Qué pesada!