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España España · Alcalá De Guadaíra - SEVILLA
Voto de HEIFER:
8
Cine negro. Intriga. Drama Comienzos de la Guerra Fría, en Viena, 1947. El norteamericano Holly Martins, un mediocre escritor de novelas del Oeste, llega a la capital austríaca cuando la ciudad está dividida en cuatro zonas ocupadas por los estados aliados de la II Guerra Mundial. Holly va a visitar a Harry Lime, un amigo de la infancia que le ha prometido trabajo. Pero su llegada coincide con el entierro de Harry, que ha muerto atropellado por un coche en plena ... [+]
22 de diciembre de 2007
6 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Holly Martins es un desconocido escritor de novelas del oeste que llega a Viena en busca de un trabajo que su fiel amigo Harry Lime le tiene prometido. Cuando Holly Martins pisa Viena, está pisando una ciudad dividida en cuatro sectores militares y dominada por el negocio del estraperlo, pues estamos hablando de la Viena de la posguerra.

Todo parece ir bien hasta que Holly llega a casa de su amigo y se entera de la triste noticia; su amigo Harry Lime murió accidentalmente atropellado por un camión. Aturdido por la tremenda noticia, Holly Martins decide visitar su sepulcro donde conoce a un hombre que le habla de su amigo Harry; posteriormente, mientras hablan los dos en un bar, ese hombre misterioso se descubre, no es amigo de Harry, si no que es un policía. ¿Y qué hacía un policía en el entierro de Harry Lime?, muy sencillo, según el agente, Harry Lime estaba metido en líos; y no en asuntos de simple estraperlo al igual que cientos de ciudadanos vieneses, no... en asuntos muchos más serios... incluso en asesinatos...

Pero el escritor de novelas estadounidense no está dispuesto a escuchar semejante infamia de boca de nadie, ¿su amigo metido en asuntos sucios?, no puede ser... Holly Martins no puede volverse a su país sin saber más sobre las nuevas circunstancias que le han salido al paso, así que decide investigar... y no imaginan la de cosas que va a averiguar, no imaginan...

La película tiene todos los ingredientes para ser una garantía de disfrute; una historia de intriga situada en un marco extraño y difícil para investigar (esa especie de torre de Babel que es la Viena de la posguerra), un buen reparto, una banda sonora como mínimo "diferente", y una dirección precisa y sobria. Pero el punto fuerte de El Tercer Hombre no está implícito en ninguno de esos aspectos, no; lo que deja permanentemente con la boca abierta en esta película es la tremenda fotografía que nos brinda. Plano a plano se nos regalan instantáneas que bien serían dignas de ser calificadas como iconos cinematográficos, segundo a segundo se nos sorprende con algún inquietante ángulo de cámara ligeramente torcido, o se nos asombra con una iluminación maravillosa o un plano secuencia magistral como el de la escena final, por poner un ejemplo.

Una buena trama sí, pero muy pocas veces un buen guión ha estado tan bien respaldado por semejante fuerza visual.

Pulsen el Play, siéntense tranquilos y disfruten de una cinta que roza la calificación de obra maestra. ¿Por que la roza y no lo es?, pues porque también tiene sus defectillos, ¿Pero quién es capaz de sacarle un defecto después de haber visto a Orson Welles y Joseph Cotten hablar aquellos diálogos en la preciosa escena de la noria, o después de ver el ya mencionado plano secuencia del final?, ¿Quién?...

Yo sinceramente me abstengo, porque son tan poquitos sus defectos que bien los puedo pasar por alto y la disfrutaréis igualmente. Si no ya me dirán...

Un 8´85 de nota
HEIFER
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