Otro gran trabajo de Brad Pitt donde Clooney cambia de estilo quedándose, como siempre, en el camino en una peli sin pies ni cabeza, ni ritmo ni BSO, ni guión ni actuaciones, pero sobre todo, sin argumento.
Puedo entender que algunos directores, como éstos dos pájaros tengan un estilo muy marcado y que viva nde él, pero lo que ya me cuesta más es que aún tengan seguidores ante tal cultivo de bazofia en el camino.
Brad Pitt, uno de los poquísimos actores respetables que quedan no suele desentonar en ninguna peli debido a su calidad, pero claro, si la peli no da para más, porque no da, ya se convierte en la megaestrella de algo como dije antes, sin guión ni argumento.
No sabes ni lo que estás viendo, los Cohen...¿Y qué?
Por cierto, creo que odio a Clooney,,,