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Voto de Palasaca:
1
2011
Iván Escobar (Creador), Álex Pina (Creador) ...
4.1
8,141
Serie de TV. Intriga. Aventuras
Serie de TV (2011-2013). 43 episodios. Una catástrofe mundial provoca un cataclismo que lleva a la desaparición de la tierra firme. Con el planeta inundado de agua, la tripulación y los jóvenes alumnos de un buque escuela parecen ser los únicos supervivientes... Aislados del resto de un mundo que ni siquiera saben si ya existe, los principales responsables de que la nave llegue a puerto son el capitán (Juanjo Artero) y la científica del ... [+]
18 de enero de 2011
34 de 60 usuarios han encontrado esta crítica útil
No hace falta haber visto más que el primer episodio para saber que la nueva serie de Antena 3, "EL BARCO", hace aguas por todas partes.
No nos engañemos: estamos ante la versión naval de "EL INTERNADO" con un toque mayor de fantasía ciencia-ficcionera de medio pelo, claramente orientado a mitigar los picores hormonales del sector adolescente de la audiencia, lo que se traduce en abundancia de pectorales de gimnasio, bikinis, camisetas mojadas, duchas mixtas y mucho rollo erótico-romántico.
Es por ello que la calidad artística de los protagonistas no ha sido ni mucho menos la principal preocupación de los creadores de esta serie. Ahí está el equipo de "yogurines" habitual de las series de Antena 3: Mario Casas, Blanca Suárez y demás "guaperas" cuya capacidad de vocalización y de impostación es inversamente proporcional al furor hormonal que desatan en las legiones de quinceañeros/as que los tienen por mitos generacionales. El único que se salva del naufragio artístico (y por los pelos) es Juanjo Artero, al que se le notan las tablas teatrales.
En lo que se refiere a la trama de ciencia-ficción, es directamente absurda (ver spoiler) y en cuanto a los aspectos de producción, los famosos decorados que recrean el interior de la goleta "Estrella Polar", aunque están bien trabajados "cantan" a la legua, además de dar la impresión de que no se corresponden con las dimensiones reales del barco, que no es un trasatlántico precisamente. Los efectos de la "tormenta perfecta" en el barco daban auténtica risa (spoiler), aunque las recreaciones digitales que muestran a la goleta en medio de la tormenta no están mal del todo.
A esto hay que unir dos defectos habituales de las series españolas: demasiadas tramas simultáneas (para tratar de contentar a todos los públicos) y excesivo metraje (75 minutos -sin publicidad- nada menos).
En fin, una serie que ha naufragado en su primera singladura. Lo habitual.
No nos engañemos: estamos ante la versión naval de "EL INTERNADO" con un toque mayor de fantasía ciencia-ficcionera de medio pelo, claramente orientado a mitigar los picores hormonales del sector adolescente de la audiencia, lo que se traduce en abundancia de pectorales de gimnasio, bikinis, camisetas mojadas, duchas mixtas y mucho rollo erótico-romántico.
Es por ello que la calidad artística de los protagonistas no ha sido ni mucho menos la principal preocupación de los creadores de esta serie. Ahí está el equipo de "yogurines" habitual de las series de Antena 3: Mario Casas, Blanca Suárez y demás "guaperas" cuya capacidad de vocalización y de impostación es inversamente proporcional al furor hormonal que desatan en las legiones de quinceañeros/as que los tienen por mitos generacionales. El único que se salva del naufragio artístico (y por los pelos) es Juanjo Artero, al que se le notan las tablas teatrales.
En lo que se refiere a la trama de ciencia-ficción, es directamente absurda (ver spoiler) y en cuanto a los aspectos de producción, los famosos decorados que recrean el interior de la goleta "Estrella Polar", aunque están bien trabajados "cantan" a la legua, además de dar la impresión de que no se corresponden con las dimensiones reales del barco, que no es un trasatlántico precisamente. Los efectos de la "tormenta perfecta" en el barco daban auténtica risa (spoiler), aunque las recreaciones digitales que muestran a la goleta en medio de la tormenta no están mal del todo.
A esto hay que unir dos defectos habituales de las series españolas: demasiadas tramas simultáneas (para tratar de contentar a todos los públicos) y excesivo metraje (75 minutos -sin publicidad- nada menos).
En fin, una serie que ha naufragado en su primera singladura. Lo habitual.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El "fin del mundo" se justifica con un experimento fallido en el LHC del CERN (aunque en la serie lo llamen de otra manera). Para "ilustrar" ese "centro de investigación nuclear" a los genios que han buscado las localizaciones no se les ha ocurrido otra cosa que buscar imágenes de ¡¡¡ un grupo de antenas de radio-telescopios !!! y de ¡¡¡ un túnel de viento !!! PATÉTICO.
Ni que decir tiene que en ningún momento se nos dice de qué va el experimento, ni qué carajo pinta en el barco una "científica" cargada con un montón de cachivaches (eso queda para la trama, claro). Y digo yo: ya que quieren dárselas de "científicos" ¿Por qué no se han montado en el buque oceanográfico "Hespérides", más preparado para estos menesteres que una goleta turística? De risa.
Claro que una de las mayores meteduras de pata del primer episodio es cuando Ulises/Mario Casas, se embarca en una motora para ir a rescatar a dos besugos que se han ido en una balsa "a pillar cobertura" para el móvil: se supone que el barco está en mitad de la "super-tormenta-perfecta" pero sin embargo puede verse cómo nuestro héroe se aleja de una goleta que se mece plácidamente en unas aguas más tranquilas que una balsa de aceite.
¿Y qué hacen unos adolescentes españoles en mitad de una hipertormenta en medio del océano? Pues ponerse a comer croquetas y contar chistes... Lógico, ¿no?
Y encima pretenden hacernos creer que una frágil goleta va a sobrevivir, así por las buenas, a una megatormenta que se zampa barcos mucho mayores y mejor dotados gracias a las coordenadas que les da la "científica"... Todo ello con un corte repentino en el que en un momento la goleta está a punto de ser tragada por una ola gigante e inmediatamente después ya es de día y navega tan tranquila en una mar calmada.
En fin, una gilipollez más grande que el Titanic.
Ni que decir tiene que en ningún momento se nos dice de qué va el experimento, ni qué carajo pinta en el barco una "científica" cargada con un montón de cachivaches (eso queda para la trama, claro). Y digo yo: ya que quieren dárselas de "científicos" ¿Por qué no se han montado en el buque oceanográfico "Hespérides", más preparado para estos menesteres que una goleta turística? De risa.
Claro que una de las mayores meteduras de pata del primer episodio es cuando Ulises/Mario Casas, se embarca en una motora para ir a rescatar a dos besugos que se han ido en una balsa "a pillar cobertura" para el móvil: se supone que el barco está en mitad de la "super-tormenta-perfecta" pero sin embargo puede verse cómo nuestro héroe se aleja de una goleta que se mece plácidamente en unas aguas más tranquilas que una balsa de aceite.
¿Y qué hacen unos adolescentes españoles en mitad de una hipertormenta en medio del océano? Pues ponerse a comer croquetas y contar chistes... Lógico, ¿no?
Y encima pretenden hacernos creer que una frágil goleta va a sobrevivir, así por las buenas, a una megatormenta que se zampa barcos mucho mayores y mejor dotados gracias a las coordenadas que les da la "científica"... Todo ello con un corte repentino en el que en un momento la goleta está a punto de ser tragada por una ola gigante e inmediatamente después ya es de día y navega tan tranquila en una mar calmada.
En fin, una gilipollez más grande que el Titanic.