La trasformación del padre y el hijo me gustó mucho, como mientras Robert se reforma en la cárcel y lo ve como una forma de aprendizaje, su hijo a las primeras adversidades por no conseguir trabajo y frustrarse por lo mismo termina volviéndose un cínico y posteriormente un delincuente.
Lo peor: aunque me gustó su personaje y le dan un enfoque un final mucho más original del que se le daban a ese tipo de roles, Lucky en el fondo es la chica "mala" que se quiere redimir cuando se enamora de Johnny, la cuestión es que durante casi toda la película parece algo no correspondido porque el no le da ni pelota en ese sentido, o la busca, ni hace caso a sus avances. por lo que todo lo que ella hace para salvarlo se siente injustificado, hasta e cierta medida arbitrario, ya sé que muchas ces el amor es así, y alguien quiere sin ser correspondido pero acá tampoco lo plantean de esa manera por lo que el personaje de ella y toda la historia de amor no está bien elaborada.
Lo mejor: como tiene un discurso cínico que va desmontando a lo largo de la historia. Diciendo que sí, las cosas son injustas pero siempre está la posibilidad de elegir y hay que hacerse cargo de las decisiones que se toman.
Lo moderno que resulta el personaje de Johnny, parece un millenial por resentido, contradictorio e incapaz de lidiar con frustraciones.
Dwyer que es el villano en realidad es un pragmático, obvio un criminal, pero no un psicópata perverso.