Esta película de Tom Six cumple con creces su cometido de acongojar e impresionar. Y todo ello pese a tener algunos elementos muy poco originales (el científico loco, unas tías buenas que se pierden en un bosque, etc) y tener un desenlace demasiado rápido.

El director consigue una atmósfera asfixiante y sobre todo logra un perfecto personaje antagonista que le da mucha credibilidad a la trama: el actor lo borda y respira locura.

En ocasiones se recrea demasiado en lo "gore", pero yo la recomiendo a todos los amantes del cine de terror, sobre todo ese tipo de miedo que te deja perplejo, que consigue intimidar, y este film es un buen ejemplo de ello.