Media votos
6.0
Votos
6,085
Críticas
2,214
Listas
17
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de floïd blue:
10
8.1
21,136
Intriga. Thriller. Cine negro
Tras la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), el padre de Alicia Huberman, un espía nazi, es condenado por traición contra los Estados Unidos. Después del juicio, Alicia da una fiesta en la que aparece un apuesto desconocido llamado Devlin. Se trata de un agente de los servicios de Inteligencia que reclama su colaboración para atrapar a Alexander Sebastian, el cerebro de los nazis en Brasil. Al principio se muestra reacia, pero finalmente ... [+]
10 de diciembre de 2012
16 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
Alicia … ¡Una borracha de aúpa! Pero no es por eso que se preste a todo este juego de espías… La razón se llama Devlin. Devlin es un espía. Encadenados es la 9ª película de Hichtcock en USA y esta vez la hizo sin ninguna imposición de la producción. Cary Grant es un espía americano. Un espía americano en Río. Que no salgan brasileñas meneando el culo es un fallo. Cuando hablan de España sacan los toros ¿no? Pues cuando se habla de Brasil hay que sacar a las brasileñas meneando el culo. Pero Hitchcock is diferent.
Devlin es un espía que Hitch le presenta de espaldas, en un recorte negro, en primer plano, está mirando al tendido, está contemplando a Alicia como se mueve y se sabe perfectamente lo que está pensando. Es verdad, lo averiguas fácilmente. Devlin, viendo su sombra en primer plano y sabiendo lo que está pensando, no cabe duda que es un tío malvado. Eso no lo dice nadie, pero es así.
Hitchcock presenta… a Alicia. La verdad, los vecinos no hablan bien de Alicia. Alicia ha cometido el terrible error de enamorarse de Devlin. Enamorarse es un error; la historia está llena de ejemplos que demuestran que por amor se han hecho muchísimas tonterías en la Historia de la Humanidad.
Luego tienes al Sr. Sebastian, (Sebastian sin acento), el nazi. Alexander Sebastian. Salvo error, todos los personajes que aparecen en el cine que se llamen Sebastian, son malvados y cabrones. Ahí tenéis al coronel Sebastian, lugarteniente de Moriarty; y mismamente, el magnífico Lubitsch nos presentó con anterioridad en “Lo que piensan las mujeres” (1941) a otro malvado de mismo nombre: Alexander Sebastian; un pianista diabólico que le quería quitar la mujer al bueno de Melvyn Douglas.
Pero eso son otras historias. Este Alexander Sebastian es un nazi. Vive con la arpía de su madre. La actriz que hace de madre, Leopoldine Konstantin, tenía tan sólo 4 meses más de edad que Claude Rains, pero lo hacen tan bien que te crees que son madre e hijo.
El Sr. Sebastian es Claude Rains, un extraordinario actor, inapelable. Se casa con Alicia totalmente enamorado, hasta las trancas, y consiente dormir en camas separadas. Pobre Claude; es penoso amar así a una mujer que no le quiere. Y nadie sufre por él.
El Sr. Sebastian se reúne de vez en cuando con unos colegas siniestros que están traficando con uranio. Lo guardan en botellas de champán ... para gastar alguna broma, supongo.
Hay gente que se atreve a tachar esta película algo así como flojilla. Pues no; Encadenados está muy lejos de las minucias del cine. Insisto: Te las crees, no hace falta mucho esfuerzo. Un guión algo artificioso, vale, de acuerdo, pero Hitchcock lo transforma en un guión lleno de intriga que te clava en el asiento.
Encadenados es una trama para disfrutar del suspense con personajes muy ricos porque Alicia y Devlin no son personas perfectas, beben, engañan, piensan obscenidades… Están hechos el uno para el otro.
Devlin es un espía que Hitch le presenta de espaldas, en un recorte negro, en primer plano, está mirando al tendido, está contemplando a Alicia como se mueve y se sabe perfectamente lo que está pensando. Es verdad, lo averiguas fácilmente. Devlin, viendo su sombra en primer plano y sabiendo lo que está pensando, no cabe duda que es un tío malvado. Eso no lo dice nadie, pero es así.
Hitchcock presenta… a Alicia. La verdad, los vecinos no hablan bien de Alicia. Alicia ha cometido el terrible error de enamorarse de Devlin. Enamorarse es un error; la historia está llena de ejemplos que demuestran que por amor se han hecho muchísimas tonterías en la Historia de la Humanidad.
Luego tienes al Sr. Sebastian, (Sebastian sin acento), el nazi. Alexander Sebastian. Salvo error, todos los personajes que aparecen en el cine que se llamen Sebastian, son malvados y cabrones. Ahí tenéis al coronel Sebastian, lugarteniente de Moriarty; y mismamente, el magnífico Lubitsch nos presentó con anterioridad en “Lo que piensan las mujeres” (1941) a otro malvado de mismo nombre: Alexander Sebastian; un pianista diabólico que le quería quitar la mujer al bueno de Melvyn Douglas.
Pero eso son otras historias. Este Alexander Sebastian es un nazi. Vive con la arpía de su madre. La actriz que hace de madre, Leopoldine Konstantin, tenía tan sólo 4 meses más de edad que Claude Rains, pero lo hacen tan bien que te crees que son madre e hijo.
El Sr. Sebastian es Claude Rains, un extraordinario actor, inapelable. Se casa con Alicia totalmente enamorado, hasta las trancas, y consiente dormir en camas separadas. Pobre Claude; es penoso amar así a una mujer que no le quiere. Y nadie sufre por él.
El Sr. Sebastian se reúne de vez en cuando con unos colegas siniestros que están traficando con uranio. Lo guardan en botellas de champán ... para gastar alguna broma, supongo.
Hay gente que se atreve a tachar esta película algo así como flojilla. Pues no; Encadenados está muy lejos de las minucias del cine. Insisto: Te las crees, no hace falta mucho esfuerzo. Un guión algo artificioso, vale, de acuerdo, pero Hitchcock lo transforma en un guión lleno de intriga que te clava en el asiento.
Encadenados es una trama para disfrutar del suspense con personajes muy ricos porque Alicia y Devlin no son personas perfectas, beben, engañan, piensan obscenidades… Están hechos el uno para el otro.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El final es antológico. Los colegas del Sr. Sebastian le esperan en el umbral de la puerta.
La madre ha desaparecido. A mí se me antoja que ha ido a hacer las maletas y a coger una pistola para escapar con su hijo. Una tía que al despertar por la mañana enciende un pitillo de la forma que lo hace, con una mano, sin mirar, aplicando el mechero Dupont con un golpe ligero de muñeca, es una madre con muchos arrestos…
Excepcional película, en conclusión.
La madre ha desaparecido. A mí se me antoja que ha ido a hacer las maletas y a coger una pistola para escapar con su hijo. Una tía que al despertar por la mañana enciende un pitillo de la forma que lo hace, con una mano, sin mirar, aplicando el mechero Dupont con un golpe ligero de muñeca, es una madre con muchos arrestos…
Excepcional película, en conclusión.