Probablemente sea a mejor película sobre fútbol que he visto nunca; sin embargo, es bastante más que eso. Se trata de un drama social, que nos refleja fielmente la vida en una ciudad industrial como Sheffield. Aunque su desarrollo es bastante típico, posee un cierto encanto, y un reparto eficiente, con Sean Bean como protagonista. El fútbol se presenta aquí como una evasión, una manera de huír temporalmente de una realidad opresiva, hasta que el protagonista recibe la oportunidad de su vida. ¿Qué hará con ella?