Conmovedor film; tierna metáfora sobre el corazón humano : Un hombre que busca reinventarse, redimirse a través del amor y el trabajo; la soledad del desierto como paisaje de fondo y el agua, como el elemento vital, que le devolverá la esperanza a este hombre desolado, brillantemente interpretado por Jason Robards ; acompañado por David Warner, en la piel de un desopilante predicador de los caminos y como si esto fuera poco..., la belleza y la gracia de Stella Stevens. El director Sam Peckinpah, fue muy cuestionado por sus films de explícita violencia,(muchas veces recortada por la censura de hollywood), pero esta vez, solo nos muestra explícito lirismo...