Esta película me hizo sentir cómo sería regresar a la vida a un ser querido que se fué, pero sabiendo que será por poco tiempo, aprovechar cada minuto para ver su mirada, escuchar su voz, sentir su vida, su presencia. Me hizo llorar como nunca y no me parece para nada sensiblero que hayan hecho que Leonard se enamore, eso es algo elemental en un ser humano y el dolor que siente al ver que la enfermedad le impide tener a esa persona es algo más real de lo que cualquiera puede pensar, la escena de la despedida de la chica es tan dolorosamente convincente que ahora escribiendo tengo que contener lágrimas. Pensar que en ese cuerpo rígido y detrás de esa mirada perdida está este ser humano esperando por una oportunidad de despertar, de verdad nunca se me va a quitar de la mente.