Seguramente he tenido suerte con las películas que he visto de este país, atendiendo a recomendaciones de compañeros de foros y tendrá malas películas como en todos lados, pero declaro mi total amor hacia el cine coreano.

Por un lado tenemos a un hombre divorciado, ahogado por las deudas, que se lanza al río desde un puente para suicidarse. La corriente lo arrastra hacia una isla cercana desde donde se ve la ciudad. Tras varios intentos de que lo rescaten o de huir pese a no saber nadar, llega a la conclusión de que intentándose suicidar por huir de la gran ciudad lo último que quiere es volver a ella y empieza a disfrutar de su vida como náufrago.

De repente la cinta nos vuelve a situar en la ciudad donde una chica que vive recluida en su habitación entre basura y sin hablar con nadie salvo por algún chat y gracias a su hobbie de mirar y fotografiar la luna con una cámara de potente lente, descubre al naúfrago y comienza a observarlo a cada momento.

El film es poesía en movimiento en un festival de luz y color en la preciosa historia de dos antisociales.

Destaco especialmente los momentos que derrochar originalidad e imaginación como entre otros el arranque donde nos cuentan a la vez que el protagonista no sabe nadar, como le tienen ahogado todos los aspectos de su vida, aunque la película en general es un alarde de ambas cualidades.

Tiene además momentos de genial comedia como la llamada de telemarketing. A su vez resulta apasionante las vivencias de él y como va sobreviviendo a la vez que como ella va superando sus miedos.

Simplemente maravillosa.

@er_calderilla