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Voto de Richy:
31,058
Comedia
Tras diez mil años de duro trabajo, Satanás está deseando retirarse, pero ninguno de sus hijos es lo bastante malvado para sustituirlo. Los mayores, Cassius y Adrian, cansados de la tiranía de su padre, deciden marcharse a Nueva York para instaurar su propio reino infernal. Nicky, el más pequeño y tonto, conseguirá evitar la sucesión encarnándose en un hombre. (FILMAFFINITY)
2 de noviembre de 2011
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nueva comedia surrealista de humor típicamente norteamericano, repleta de cameos y música, para mayor gloria de la ascendente carrera de Adam Sandler.
"Little Nicky" es la historia de un hijo del Demonio, y no es ningún insulto. Satán (Harvey Keitel metiéndose en estos berenjenales por un puñado de dólares) lleva reinando 10.000 años en el Infierno y está pensando ceder su trono a uno de sus 3 hijos, Cassius (Tiny Lister), Adrian (Rhys Ifans) y Nicky (Adam Sandler). Al decidir continuar reinando 10.000 años más, Cassius y Adrian deciden ir a Nueva York para crear su propio Infierno, pero al salir congelan la puerta del Infierno y su padre se queda sin poder recibir almas, con lo que se muere poco a poco. Nicky será el encargado de traer de vuelta a sus hermanos viajando a Nueva York, y se verá perdido en un mundo que, en el fondo, no es tan distinto al suyo.
La trama está llena de "gags" y música heavy que se va desarrollando conforme avanza la cinta. La trama, más absurda imposible, es lo de menos en un filme donde lo único que importa es hacer el chiste más gracioso y la mueca más estúpida, algo que a Adam Sandler se le da bastante bien (sobre todo lo último).
De cameos también va bien servida: Carl Weathers, Rob Schneider, Quentin Tarantino (insuperable) e, incluso, el gran Ozzy Osborne, autoparodiándose.
Para reírse un rato y disfrutar de su potente banda sonora.
"Little Nicky" es la historia de un hijo del Demonio, y no es ningún insulto. Satán (Harvey Keitel metiéndose en estos berenjenales por un puñado de dólares) lleva reinando 10.000 años en el Infierno y está pensando ceder su trono a uno de sus 3 hijos, Cassius (Tiny Lister), Adrian (Rhys Ifans) y Nicky (Adam Sandler). Al decidir continuar reinando 10.000 años más, Cassius y Adrian deciden ir a Nueva York para crear su propio Infierno, pero al salir congelan la puerta del Infierno y su padre se queda sin poder recibir almas, con lo que se muere poco a poco. Nicky será el encargado de traer de vuelta a sus hermanos viajando a Nueva York, y se verá perdido en un mundo que, en el fondo, no es tan distinto al suyo.
La trama está llena de "gags" y música heavy que se va desarrollando conforme avanza la cinta. La trama, más absurda imposible, es lo de menos en un filme donde lo único que importa es hacer el chiste más gracioso y la mueca más estúpida, algo que a Adam Sandler se le da bastante bien (sobre todo lo último).
De cameos también va bien servida: Carl Weathers, Rob Schneider, Quentin Tarantino (insuperable) e, incluso, el gran Ozzy Osborne, autoparodiándose.
Para reírse un rato y disfrutar de su potente banda sonora.
