Haz click aquí para copiar la URL

Lovecraft Country (Serie de TV)

Serie de TV. Thriller. Drama. Terror Serie de TV (2020). 10 episodios. Atticus Black (Jonathan Majors) comienza un viaje por carretera en los años 50 junto a su amiga Letitia (Jurnee Smollett-Bell) y su tío George (Courtney B. Vance) en busca de su padre desaparecido (Michael Kenneth Williams). El viaje se convertirá en una lucha por la supervivencia, afrontando el racismo de la América blanca así como una serie de monstruos que podrían haber salido de un libro de ... [+]
<< 1 3 4 5 6 8 >>
Críticas 40
Críticas ordenadas por utilidad
18 de noviembre de 2020
8 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Floja. salvo el primer capitulo lo demás es ¿Qué hacemos con tanto presupuesto? Copiemos y peguemos a ver que sale. Una cosa sin sentido.
Alain
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de septiembre de 2020
11 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Estamos en una época curiosa, una época en el que el nombre de Lovecraft sirve a oscuros motivos marketinianos.

Tanto si hablamos del libro como de la película, estamos hablando de dos productos que en nada tienen que ver con Lovecraft y sus amigos. Se inspira fuertemente, se autoreferencia de manera anecdótica en distintos puntos (en el libro se llega a comparar con un chascarrillo el parecido entre libros como el Necronomicón y el Libro de la Vida) y los personajes viven en un mundo en el que conocen a Lovecraft y su obra.

Que decir tiene que todas estas referencias son un profundo error, por el simple hecho de que las comparaciones son odiosas y es que por muchos defectos que tengan la obra de Lovecraft y sus discípulos, los Hijos de Adán y la pseudomitología inventada se quedan cortos, sosos y escasos comparados a Dioses Antiguos de más allá del espacio y del tiempo.

El libro es justito, entretenido, sin pretensiones y tiene la virtud de ir al grano. Deja muchos puntos sin explicar, pero francamente, no importa: es literatura barata, un fast-food literario que se deja leer para olvidarlo en cuanto se termine. El terror brilla por su ausencia, pero al menos no nos hará sufrir.

Pero en cuanto la serie...ay la serie. Si el libro se mantiene por los pelos, la película se derrumba estrepitosamente. En sus primeros compases, cuando se mantiene fiel al libro, entretiene. La fotografía es espectacular y la recreación es perfecta. Tiene un aire a Green Book que deja un gran sabor de boca.

El problema viene cuando Jordan Peele y compañía, en vez de usar el guión para explorar zonas inexploradas en el libro, decide cambiarlas completamente. Y ahí es cuando se nos va el asunto de las manos. Capitulos densos, aburridos, con patéticos intentos de terror y personajes planos y poco creíbles que van dando tumbos de un escenario para otro. Los capítulos se amontonan uno tras otro, soporíferos cuando ahondan en su trama sobrenatural que ya daba poco miedo en los libros.

Por alguna razón, el autor del libro y Jordan Peele querían hablar de segregación y racismo a mediados del siglo XX y pensaron que ponerle purpurina de "terror" por encima resultaría agradable a la audiencia. Quiero decir, entiendo el concepto de "el verdadero monstruo de todo esto es el hombre. Sobre todo el hombre blanco, pero el hombre al fin y al cabo", pero está tan subrayado y es tan machacón que cuando ves que no hay nada detrás. aburre.

En definitiva, una serie mediocre. Otra de tantas.

Ahora vamos a lo interesante: lo que realmente huele a podrido en este universo. Sigue en spoilers.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Diego
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
23 de enero de 2021
8 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
La premisa no es mala, y la puesta en escena a ratos es soberbia. Podía haber sido una buena historia fantástica sobre magia. Por desgracia es magia "negra" y las comillas no sobran. La reivindicación antirracista y feminista no está aquí supeditada al argumento, sino al revés.

Como el Mandarín de Ironman III o esa escena de los Simpson donde Homer le explica a Mel que para que el perro parezca malvado sólo tiene que entrecerrar los ojos y mirar por el rabillo, aquí para saber quién es el malo sólo hay que ver si es blanco. Los blancos son malos; no sólo malos: también cobardes y paletos. Los negros son todos valientes, cultos y bondadosos. Personajes planos como lienzos, con una sola capa de pintura, con una paleta de dos colores. Personajes como los de Michael Fassbender en 12 años de esclavitud o Samuel L en Django no tienen cabida en esta historia.

Otro tanto con el feminismo: todas, absolutamente todas las actrices con papeles relevantes de la serie tienen su escena de reivindicación femenina. Hay al menos una en cada capítulo y tres capítulos prácticamente completos dedicados al asunto. Demasiado para un total de 10 episodios.

En general hay demasiado tema reivindicativo para una buena ficción sobrenatural. Y es demasiado sobrenatural para ser un drama social. Quizá mi problema es que vi hace poco Watchmen y me pilla un poco saturado, pero la propia lista de géneros (Thriller, Drama, Terror, Sobrenatural, Años 50, Road Movie, Racismo, Sureño) parece un revoltijo excesivo.

Con todo, lo peor es lo que han hecho con Mike Williams: de Omar Little sólo queda que sigue siendo marica.
EscritorDeInvierno
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3 de enero de 2021
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me esperaba bastante más. la historia principal comienza interesante pero a medida que avanza va perdiendo fuelle. Los capítulos me resultan bastante desiguales, algunos me gustan, otros me resultan un auténtico tostón, incluso absurdos. No sé si le daré oportunidad a la segunda temporada que parece que ha sido confirmada.
No he leído la novela, pero más que una historia sobre monstruos es una historia sobre el monstruo del racismo. En esta serie todo aquel que sea caucásico es un auténtico demonio, por no emplear otra palabra y que censuren mi crítica.
En spoilers entro un poco más en detalle
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
selene
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de octubre de 2020
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Territorio Lovecraft" es un experimento fallido desde cualquier prisma que se mire. Un fracaso, por otra parte, bastante de prever, habida cuenta de lo forzado de la propuesta. Porque hay prosas, como la de Kerouac o la de Cortázar, de muy ardua adaptación a la pantalla, y lo mismo sucede en el caso de Lovecraft, cuyo barroquismo salomónico y "terribilità" veterotestamentaria mal casan con la tonta efervescencia de nuestros días.
La trasposición de su peculiar universo encierra asimismo un sinfín de problemas, salvo que se asuma sin complejos una estética de serie B por la que pocas productoras apostarían hoy, mucho menos un transatlántico como HBO, y, aun así, el riesgo de caer en el ridículo es grande. Otra opción —y además muy barata— consiste en ahorrarse la proliferación de baba y tentáculos, limitándose a sugerir el cacareado —y, en general, escasamente entendido— horror cósmico, tal como viene haciendo el tándem Benson-Moorehead de un tiempo a esta parte.
Claro, que todo lo anterior resulta ocioso cuando los responsables de esta "Territorio Lovecraft" tardan apenas un episodio en perderse en un absurdo laberinto mistificador, hasta tal punto que del (hoy) reconocido escritor de Providence no queda más rastro que en el título.
Sin tener nada en contra del bastardeo de géneros, creo que el cóctel que se han sacado de la manga constituye un imposible artístico de tal calibre que extraña no lo hubieran visto venir mucho antes. Lo que funcionaba como un reloj de alta precisión en "Déjame salir" ("Get Out", 2017), mezcla de thriller, denuncia social y "blaxploitation", no tiene por qué hacerlo en todos los contextos; del mismo modo que el sello Jordan Peele, como en su día el de Tarantino, no supone per se una garantía de calidad. Además, se empieza a correr el riesgo de que el movimiento "Black Lives Matter" acabe convertido en el perejil de todas las salsas, la cebolla caramelizada del audiovisual contemporáneo. Una ubicuidad, venga a cuento o no, de nefastas consecuencias, y no sólo estéticas.
Tampoco la localización temporal parece especialmente acertada, más allá del atractivo "vintage" de ciertas estampas. Para protestar contra los gravísimos problemas —estructurales y, por ende, trágicos— de racismo y desigualdad que aquejan a los Estados Unidos no hacía falta viajar hasta los lejanos, casi prehistóricos cincuenta. Sobran los ejemplos coetáneos, casi diarios, de abusos policiales. Dicho alejamiento cronológico conlleva, encima, una implicación no sé cuán inconsciente o indeseada, pero de suma gravedad, porque invita a creer que, en comparación con los años previos a la lucha por los derechos civiles, hoy no estaríamos tan mal.
Hasta la ilación entre episodios se antoja precaria. Sin una línea argumental clara, o moderadamente coherente, la serie queda reducida a una colección de ocurrencias cuyo interés, encima, decrece de manera exponencial con el paso de las semanas. Y cuando, de pronto y como por ensalmo, uno de ellos atesora cierta calidad —Meet Me in Daegu, el número 6—, de inmediato se nos agrede con un delirio lisérgico sin un ápice de su encanto intrínseco —I Am—, diríase que a fin de recordarnos el bodrio cósmico con el que se nos ha venido atormentando durante dos larguísimos meses. Ni que se nos fuera a olvidar.
A partir de entonces, siquiera bizarradas como esa versión satánica de las niñas de La cabaña del Tío Tom logran hacer remontar una serie de la que sólo queda esperar que acabe lo antes y de la manera menos degradante —para sí, para los espectadores— posible. Ojalá no haya una segunda temporada, y si la hay, en fin, que se la encarguen a cualquier otro. Algo tienen ganado: nadie puede hacerla peor.
Carorpar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 3 4 5 6 8 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow