Azul extremo

Unas pocas líneas para esta película que merece estar más hundida que el avión que sale en ella y el barco del siglo XIX.
Lo único, que da pena ver a Paul Walker, sabiendo el final que tuvo.
Por lo demás, nulo guión, reiterativa y de escasa intriga.
Eso sí, como ha dicho ya alguien aquí, lo mejor son los paisajes submarinos y los peces. Pero para esto ya hay espléndidos documentales.

La película trata de un grupo de buceadores, pero no se preocupen que antes de colocarce los trajes se ocupa gran parte del metraje en mostrar el cuerpo de Jessica Alba y el de Paul Walker, para que la novia que fue obligada al cine tenga algo con que deleitarse también.

El resto está repleto de diálogos insulsos, esteriotipos como el hermano del protagonista haciendo del típico idiota y la novia interpretando a la típica buscona, mafiosos, sicarios que parecen salidos de una pasarela, y nada más.

Aunque a mi esa expresión de «tío bueno» no me gusta y no la uso, es la que pega para definir las intenciones de «Inmersión letal», película que, pese a todo, no cae en la estupidez típica de este genero juvenil ni tampoco en lo chabacano. La historia tiene el buen gusto de unas Bahamas paradisíacas, unos buceadores expertos y un tono comedido y bastante sensato.

Toca hablar con gran pena del guapísimo de Paul Walker, actor al que hubiéramos querido ver más a menudo en el cine, oportunidad que, por desgracia, la vida nos ha quitado. Aquí luce palmito bronceado, ojos de un azul más hermoso que el del mismísimo Mar Caribe, sonrisa perfecta y encanto masculino para quedarnos sin oxígeno. Su novia en la ficción es la exótica y dulce Jessica Alba, a la altura de las circunstancias, aunque verla partirle la cara a un hombre resulta chocante. A destacar también la presencia del modelo internacional Tyson Beckford, de una belleza impresionante, una década después de aquel «Un-Breake My Heart» de Toni Braxton. No me perdía el videoclip.

«Inmersión letal» tarda en meterse en el agua, y esa sensación la persigue durante todo el metraje, como si lo que te estuviesen contando fuese lo de menos. La trama tiene su punto de acción, su puntito de intriga y su música con gancho.

Podría haber sido peor.

Ésta es una de esas películas en las que si el espectador no es demasiado exigente, no saldrá decepcionado de la sala ya que en su conjunto cabe decir que la película cumple una de las funciones principales del cine ( que en los tiempos que corren hoy en día yo tengo muy en cuenta) que es la de entretener. Si, por contra, te paras a analizar la película en sí pues es evidente que no va llegar siquiera al aprobado.

Yo soy fan de Jessica Alba, y por tanto muy mala ha de ser la película (o muy fea ha de salir ella) para que yo salga decepcinado de la proyección.

A veces debemos recurrir al cine para poder ver bellezones del calibre de esta muchacha; y si aparte se nos cuenta una historia que no quiere ser pretenciosa pero que a la postre no aburre y hace que pasemos un rato entretenido, pues bien comprada estará la entrada.

Si soy sincero no vi esta película por que me pareciera interesante, sino porque me encanta Jessica Alba, además de porque esta buenísima porque me encanta como actúa.

Me parece que es la única que lo hace genial dentro de las posibilidades de esta pésima película.

El argumento no engancha, la parte de acción no es demasiado buena y tampoco la de suspense.
Tampoco tiene unos efectos especiales buenos aunque los paisajes y la parte de debajo del mar no están mal.
Y por cierto la banda sonora es realmente mala.