El juego

The Game es una fantástica película de suspense donde consigue mantener al espectador en tensión durante toda la película, sin relajación y sin momentos baratos, la película es un genial puzzle donde cada pieza encaja a la perfección.
Lo malo de la película, solamente te sorprende la primera porque en la segunda vez uno ya sabrá como terminará la película.
Michael Douglas está fabuloso y en un papel bastante infravalorado, parece ser que la acción está lejos de las buenas interpretaciones, pues no, aquí está todo muy bien logrado y Douglas consigue llevar a la acción a un hombre arrogante y bien interpretado.
A su vez la película no es un simple puzzle sino que esta historia presenta un fondo humano y moral pues hace plantearse el valor del dinero y el causante de muchos dolores de cabeza, de como el dinero corrompe a las personas y las destruye por dentro, es el ejemplo de grandes fortunas que olvidan o que quizás no conocen lo que significa esta a otro nivel donde la felicidad está muy lejos de la cantidad de dinero que uno posee.
Sin duda, como dice el crítico Javier Ocaña, una joya de entretenimiento.

¿Como es posible que un guión con tantas cosas que no acaben de encajar pueda ser tan rematadamente bueno y entretenido?
The Game plantea un argumento entretenido apoyado en una premisa prometedora. Sobre ella se construye un guión plagado de trampas y giros, que en ocasiones pueden ser muy inverosímiles y otras veces son sencillamente geniales.
David Fincher todavía no demuestra el verdadero talento que tiene (Habría que esperar a "La red social"), pero ya va dando muestras.
Con todo ello se logra una película entretenida y bien hecha, a pesar de sus fallos.
Michael Douglas repite el mismo papel que en "Wall Street", pero con matices y de una forma nueva, pero sale airoso.
Un exquisito montaje y un brillante ritmo es lo que consiguen que estés pegado a la butaca y los más importante, entretenido.

Fincher, el gran maestro de los finales brillantes, la caga por completo. Si en "Seven" lo bordó, aquí se monta una paranoia total para culminarla en un desenlace chusco al más puro estilo "Los Serrano", pero que parece haber colado porque a muchísima gente el invento le ha encantado. Sinceramente no me lo explico.

Douglas, el gran maestro de la sobriedad interpretativa, mantiene el tipo. Si en "Wall Street" lo bordó, aquí recita estoicamente el delirante guión y hace lo que puede para darle algún viso de verosimilitud al asunto. Es, sin duda, lo mejor de la película.

La historia no es sólo que esté llena de trampas, que lo está; es que rebasa con creces todos los límites incluso de lo fantástico. Fincher inventa un juego imposible, intenta envolverlo en un halo de angustia, suspense y claustrofobia, y cuando le da la puntilla con ese desenlace alucinante que a algunos les ha parecido tan genial, se carga todo el invento.

Que entretiene? Pues sí, es evidente que la intriga está ahí y que el espectador contempla alucinado todo el proceso con la tensión de no saber qué es lo que está pasando. Por eso, y a pesar del trampeo obvio, no se merecía ese final, que en mi opinión sólo consigue decepcionar al que espera una explicación coherente y medianamente razonable a todo lo que ha estado preguntándose.

Brillante película protagonizada por Michael Douglas. Desde el mismo inicio hasta el final consigue embaucarte y mantenerte pegado a la pantalla, porque cada minuto que va pasando te va enganchando más y más hasta el final.
El reparto, aunque principalmente sea Michael y Deborah Kara Unger, está bien; y por supuesto el papel de multimillonario es algo que a Michael Douglas le queda como anillo al dedo. También merece especial mención Sean Penn, que a pesar de sus escasos minutos de metraje, sigue demostrando el talento que posee.
De la trama no hay mucho que decir, simplemente que es perfecta. Logra confundirte con lo que es verdad y lo que no hasta el final; un punto a favor. Logra entretenerte de principio a fin; segundo punto a favor. En ningún momento flojea ni decae la calidad (cosa difícil hoy en día en el cine); tercer punto a favor... En resumen, una historia muy trabajada, elaborada y estupenda.

Lo mejor: Todo. Actores, historia genial, el desarrollo de los acontecimientos, la dirección y por supuesto el magnífico y sorprendente final que posee.
Lo peor: Nada.

PD: ¿Qué se le regala a alguien que lo tiene todo? No estaría mal que existiera una idea así, ¿verdad?

* Muy recomendada de ver *

Y los que opinan de forma negativa sobre esta obra deben ser eso, alimento de gusanos ya que no se entiende de otra forma.
Cuando ves un espectáculo de magia, de mayor o menor nivel, sabes que lo que estás viendo es falso, que hay trampa. ¿Acaso eso le quita mérito?

En esta obra con una clase magistral de estilo nos muestran algo básico. Vamos a joder al ricachón poderoso. Cierto que no tiene un trágico romance, un niño tullido al que salvar o una joven desvalida que termina en la prostitución. Pero no nos engañemos, en el fondo y no tan en el fondo, nuestros instintos primarios es lo que buscan. Eres un cabrón poderoso y desagradable, mereces sufrir.

El papel le va como un guante a Douglas, tanto como a sus acompañantes. Tiene un ritmo que te mantiene pegado a la acción sin saber hacia donde se dirige el siguiente paso. Y con un final soberbio.
No tiene un excelente por dos cosas:
-Una cosa es putear y otra es ser sádico, y en algunas ocasiones, pocas, pasan a lo segundo.
-Yo creo en el embaucador Fincher, pero algunos de sus "trucos", pocos, no les encuentra uno el sentido.