Tengo ganas de ti

Cosas sin sentido:

- Una carrera de motos en la que tu rival intenta asesinarte y al final frenas en seco quedando en tablas, como colegas.
- Gente que pasa del éxtasis a la depresión absoluta en cero coma.
- Unos niñatos sin trabajo viviendo en pisazos y con vehículos de lujo.
- Polvos de aquí te pillo, aquí te mato, en los que aparecen repentinamente mantas tiradas en el suelo para hacer el casquete más cómodo.
- Paramos en un sitio que nos pilla de camino... ¿¿¿UNA PLAYA SALVAJE??? ¿En que ciudad de este país una playa salvaje te queda de camino entre dos calles?
- La moto de Mario Casas es mejor que el coche fantástico. El va en moto desde el punto A al punto B, luego lo llevan en coche otra vez al punto A, ¿y la moto? Ahí mismo, esperándole.
- El protagonista consigue a regañadientes el trabajo que todo hombre deseearía, ajustar tangas, colocar sujetadores... Y aún cumpliendo todos los supuestos de despido posibles, el jefe le suplica que se quede. ¡Nadie tiene mejor gusto para la ropa interior femenina que Casas!
- Casualidades, casualidades y más casualidades por minuto... Esos niños no necesitan móvil. Si quieres encontrarte con alguien sales y lo ves.
- Mario Casas con un pepino de moto pero sin casco, que ya se dejó demasiada pasta en la moto como para gastar en tonterías como el casco o el seguro... Cosas de cachondos o gitanos, supongo.

No soy muy fanático de las películas españolas. Llevaba años sin ver una. Por casualidad pillé '3MSC' y, aún disgustandome el protagonista de la cinta, y sabiendo que es lo que iba a ver, he de decir que la película, dentro del rango de las de su género, se dejaba ver. Contaba una historia clara, y a raíz de ella salían algunas sub-tramas que contenían un cierto interés. Sin ser una obra de arte, si que podría ser un 6/10.

Decidí ver su secuela, craso error por mi parte. 'Tengo ganas de ti' sigue una dirección parecida, pero no igual que su predecesora. Es más madura. Pero también echa a los tiburones casi todo lo visto en '3MSC'.

Todo lo ocurrido con Babi pasa a un segundo plano (que digo segundo, cuarto como mínimo). En ningún momento existe un trío amoroso, puesto que Casas y Valverde solo se encuentran frente a frente una vez en toda la película (y terminan como el público podría esperarse). Clara Lago es un soplo de aire fresco, aporta mucho y actúa/se comporta con mucha naturalidad.

Uno de los problemas de esta cinta pasa por las tramas secundarias. Tramas que, de ser tan tan secundarias, podrían pasar por ser innecesarias. Creo que, teniendo a Babi en pantalla durante como máximo 10 minutos, lo que ocurra en su familia (padre, madre y hermana) carece de interés. Y sin embargo nos lo meten con calzador con situaciones que rozan lo grotesco. Es ya famosa la frase: 'Tía, estoy nerviosa, ¿nos drogamos?'.

Dicho esto, esta película no nos cuenta nada nuevo, son dos horas seguidas viendo a Mario Casas actuar de la misma forma que en la primera película, ligando con la guapa de turno (Lago), la cual hace un trabajo magnífico, mientras de fondo se vislumbra el contorno de Babi. No existe nada más que eso, salvo los cameos (algunos en demasía, y otros en carencia) de Chino y Pollo (parece una broma, pero no, lo de los nombres en esta película es surrealista; Babi, Hache, Katina, Gin, Pollo, Chino...).

Mención especial a Pollo, me sobra su escena con Hache en el cementerio. Hubiera bastado con la escena donde 'perdona' a Hache subidos en la moto.

En definitiva, caspa, caspa y más caspa, salvado en parte por Clara Lago. Una película que no aporta absolutamente nada y que tira atrás 'lo bueno' de '3MSC'.